La pasada semana también comenzaban los trabajos de prospección arqueológica en el solar donde se construirá el auditorio de Vigo, en la calle Beiramar. De momento, la empresa encargada de esta tarea todavía no ha hallado ningún vestigio arqueológico. En este caso, el solar se corresponde con una zona de relleno ganada al mar en los años cincuenta de la pasada centuria.
Antes de que fuera derriba el edificio de Casa Mar, se realizó una cata mecánica en la que se hallaron restos de cerámica de época romana. Es probable que estos restos se correspondiesen con ánforas destruidas durante el desembarco de mercancías en esta zona, que en el pasado fue la gran playa de Coia.
Sin embargo, la proximidad del yacimiento romano de las calles Juan Ramón Jiménez y Marqués de Valterra hace mantener la cautela a las autoridades que velan por el patrimonio histórico gallego.
Tres museos
La época romana quedará bien representada en Vigo cuando se concluyan los proyectos de musealización de tres yacimientos. El próximo verano ya podrá ser visitado el museo de la villa romana de Toralla, en la antigua finca de Mirambell, datada en el siglo IV. Algo más habrá que esperar para ver el museo de las salinas de las calle Rosalía de Castro, ubicado bajo el centro de salud del Sergas, actualmente en período de obras. Y mucho más habrá que esperar por el museo al aire libre de la factoría de salazón, del siglo I, descubierta en un solar de la calle Marqués de Valladares, aún sin comenzar.