«En el spa de Monçao se habla más gallego que portugués»

Monica Torres
Mónica Torres MONÇAO

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Mónica Torres

Tres años después de los cierres por covid, la cifra de personas que cruzan el Miño a diario para disfrutar de las piscinas y de otros servicios del norte luso se ha vuelto a disparar. Son el 60 % de los usuarios

11 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

«En el spa de Monçao se habla más gallego que portugués todos los días». La encargada del servicio de atención al cliente de las termas de la localidad portuguesa confirma lo que se escucha de puertas adentro. «El 65 % de los clientes son gallegos en estos momentos», afirma mientras despide a un grupo de más de veinte que acaba de disfrutar del primer turno del día. Tres años después de que el norte luso se blindara por el covid y cerrara todos los servicios públicos, las cifras de personas que cruzan el Miño para disfrutar de servicios al otro lado de la raia se ha vuelto a disparar. 

No son solo los vecinos de municipios colindantes los que atraviesan los puentes como si fueran simples calles. La inmersión va más allá. «Vengo una vez a la semana desde que, hace ya mucho tiempo, me regalaron unos bonos y descubrí el sitio», explica tras disfrutar de una sesión matutina en las termas María Fátima Amoedo. El viaje desde Redondela le compensa «porque aprovecho y hago otros recados y el circuito del spa no es muy grande, pero sí cómodo», indica. El desplazamiento le permite ajustar también la cesta de la compra porque siempre hay ofertas distintas, según la ribera del Miño en la que pare , incluso en supermercados de la misma cadena separados por poco más de dos kilómetros de distancia.

«Mi marido y yo venimos una vez a la semana. Mondariz nos queda más cerca, pero este es mucho más barato y está bien», señala María Jesús Pazo, de Ponteareas a la salida de las termas. Frente a este espacio, ubicado a pie de la ecopista del Miño, declarada en el 2017 como la tercera mejor vía verde de toda Europa por la Asociación Europea Greenways y la propia UE, y de la que también disfrutan más gallegos que portugueses, está la piscina de Monçao, donde también superan el 60 % del porcentaje total.

El río Miño y su entorno fueron elegidos en el 2021 en la edición internacional del periódico The Guardian como uno de los diez mejores destinos turísticos dentro de Portugal por las características de sus espacios naturales, los deportes de aventura, sendas y ecovías, zonas de campismo, sus aguas termales y su gastronomía. Según los datos de los municipios por los que discurren estos 50 kilómetros de paseo pegado al Miño entre Monçao y Caminha, ratifican que seis de cada diez usuarios proceden de Galicia. Supera el 53 % el porcentaje de los que hablan gallego en la piscina municipal de Valença, confirma desde el Concello.

En el caso de la restauración del recinto amurallado, los gallegos suben hasta el 85 %, un porcentaje similar al de los clientes del comercio local de la fortaleza. Las cifras corren río abajo. El alcalde de Vila Nova de Cerveira, Rui Teixeira, apunta igualmente que el 60 % de los usuarios de su piscina son gallegos, «pero quizás aun son más lo que disfrutan del parque de O Casteliño y, tanto en la feria semanal como en la actividad económica diaria de la villa, la estimación llega hasta el 70 %». «Somos un espacio único europeo que comparte actividades, conocimientos y estructuras en el día a día», destaca el regidor luso.

Valedoras que quieren «rachar con bucrocracias incoherentes»

La eurociudad Cerveira-Tomiño cuenta con dos valedoras, una figura que tiene como principales competencias recoger quejas y sugerencias del vecindario y remitir informes y recomendaciones relativas a las relaciones transfronterizas. La tomiñesa Ana Fernández Ordóñez, licenciada en Geografía e Historia, fue designada por Tomiño. Cerveira designó a Manuela Ferreira, que trabajó durante más de 35 años en la Cooperativa Agrícola de este municipio luso. Ambas comparecieron ayer con los respectivos alcaldes, Sandra González y Rui Teixeira, para su presentación oficial y la consigna conjunta de «rachar con burocracias incoherentes». «Solo quien reside aquí y se mueve a diario al país vecino, sea por trabajo o por ocio, puede testimoniar eventuales trabas y burocracias que ya no tienen razón de existir», señaló Manuela Ferreira.

Entre las principales preocupaciones, avanzan que pedirán al Ministerio de Interior que aclaren si se repondrá el control fronterizo en agosto por la visita del Papa para intentar evitar los perjuicios para la ciudadanía transfronteriza. Consideran también necesario eliminar el período de validez de la tarjeta europea sanitaria. La figura de las valedoras se creó en julio del 2017.