Padín tendrá que pagar 1.500 euros por no hacer cumplir una sentencia del 2014
05 sep 2018 . Actualizado a las 13:19 h.El juzgado contencioso administrativo número 1 de Pontevedra, que lleva meses requiriendo al Ayuntamiento de Tui para que ejecute una sentencia del 2014 que anula las licencias de actividad y obra de la pirotecnia La Gallega situada en Baldráns, ha impuesto una multa coercitiva al alcalde, Carlos Vázquez Padín (Converxencia 21), por un importe de 1.500 euros. Se trata de la pirotecnia cuyo dueño almacenaba material de forma ilegal en distintos zulos de la parroquia de Paramos, uno de los cuales explotó en mayo, arrasó la aldea de A Torre y mató a dos personas de nacionalidad marroquí asentadas en la parroquia.
El juez impone la sanción por no ejecutar esa orden, ratificada en el 2015 por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. El Concello tenía la obligación de precintar el taller pirotécnico y demoler una parte de sus instalaciones, que no se ajustan a la legalidad urbanística.
El regidor tudense, Carlos Vázquez Padín, confirmó ayer que ya conocía la existencia de la multa pero que «aínda non me entregaron a notificación». El alcalde asegura que va a hacer «de inmediato o que se teña que facer». De paso, lanzó una pulla al departamento municipal de Urbanismo, con el que mantiene una fuerte disputa, al decir que no se sintió «ben asesorado nunca dende que son alcalde». «É moi importante contar cunha asesoría de confianza porque nunca me sentín ben asesorado, nin neste tema, que é o prioritario, nin en ningún outro urbanístico», insistió ayer el regidor.
Padín avanzó que esta tarde mantendrá una reunión porque «ata agora estiven dedicado en axudar aos veciños e, aínda que en xullo xa se tratou algo do que se ía facer, houbo certa descoordinación entre os avogados».
Hoy tendrá un encuentro con dos letrados y un asesor jurídico. Uno es el que representa al Concello en la causa que sigue en el juzgado contencioso administrativo de Pontevedra en relación a la pirotecnia de Baldráns, a la que se le anularon las licencias judicialmente por problemas de retranqueos. El otro es el abogado del despacho vigués de Garrigues contratado por el Gobierno local para la causa que se sigue en Tui, aún en diligencias previas, contra el propietario del almacén pirotécnico, Francisco Lameiro, conocido como Paco O Fogueteiro, y en la que se han personado más de 150 demandantes entre particulares, empresas y aseguradoras. Se le investiga por presuntos delitos de riesgo catastrófico, homicidio imprudente, daños imprudentes y tenencia ilícita de explosivos, en relación a la explosión del 24 de mayo.
La pirotecnia está ubicada en Baldráns, a cuatro kilómetros del almacén clandestino que explotó en Paramos. La inacción del Ayuntamiento fue advertida reiteradamente por la jueza y conllevó ya la imposición de, al menos otra multa coercitiva al actual alcalde, por importe de 300 euros y que se recurrió, según indicó entonces, porque no había tenido tiempo material desde su acceso al cargo para conocer la situación del expediente.
El pasado 3 de mayo, la jueza emitió una nueva providencia en la que le daba diez días para que le remitiera las actuaciones que se estuviesen llevando a cabo para dar cumplimiento a esa sentencia del 2014. La pirotecnia sigue abierta, según los vecinos.