Finge ser la conductora tras accidentarse con su hijo, que pilotaba el coche sin carné

Monica Torres
m.torres TUI / LA VOZ

TUI

Santi M. Amil

La Guardia Civil destapa un intento de estafa al seguro por parte de la mujer de Tui

25 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La Guardia Civil ha destapado otros dos nuevos intentos de estafas a aseguradoras de vehículos. En muchos de los casos denunciados hasta ahora, los timadores fingían accidentes o incluso los provocaban. Esta vez no solo han querido sacar rentabilidad económica de forma ilícita. En uno de los intentos de estafa se ha dado una paso más: una mujer permitía que su hijo condujese el vehículo en el que circulaban los dos sin que el joven se hubiera sacado nunca el permiso de conducir. El accidente que sufrieron el pasado mes de marzo en una carretera de O Porriño hizo saltar las alarmas. En el siniestro se vieron implicados dos vehículos que colisionaron. La mujer, vecina de Tui y de 43 años, que viajaba en uno de ellos, declaró en calidad de conductora. Su coche, un Citröen AX, sufrió importantes daños materiales y tanto ella como su hijo resultaron heridos en el siniestro.

Ante la aseguradora la mujer se identificó como conductora, pero el GIAT (el Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico), desmontó la versión que dieron de los hechos tras el siniestro. Los especialistas demostraron que quien conducía realmente el vehículo siniestrado era el joven, de 26 años y sin carné. Madre e hijo falsificaron los datos para poder reclamar las indemnizaciones económicas que les pudiesen corresponder. La investigación de la Guardia Civil no solo les ha dejado ahora sin derecho a damnificación alguna sino que deberán responder ante la ley; el joven por vía penal, ya que se le investiga por un presunto delito contra la seguridad vial, y su madre, investigada por estafa.

Otro de los timos que ha evitado la Guardia Civil se refiere al accidente que tuvo lugar el pasado 14 de julio en Salvaterra do Miño, donde un vehículo se salió de la calzada y volcó. En el momento del accidente se identificaron a los ocupantes, dos hermanos vecinos de O Porriño de 47 y 42 años. En este caso, uno de ellos dio positivo en la prueba de alcoholemia así que asumió las responsabilidades de la conducción el otro hermano. Las indagaciones realizadas del GIAT demostraron que el conductor era la persona que había bebido. De nuevo, como en el siniestro de O Porriño, al verdadero conductor se le investiga por un delito contra la seguridad vial y otro por estafa.