Mañana acaba el plazo para las subvenciones por situaciones de emergencia o de naturaleza catastrófica
20 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Última llamada para los afectados por la explosión de Paramos que precisen ayuda económica. Desde que comenzó la crisis, el Concello ha insistido en que todas las víctimas pasen por el centro de afectados de Guillarei, para hacer un seguimiento personalizado, pero mañana además se acaba el plazo para poder solicitar las ayudas del Gobierno Central que recoge el Decreto 307/2005. Son ayudas complementarias que se pueden solicitar, siempre que se cumplan los requisitos pero compatibles con las de la Xunta y las del Concello, que ya se pueden pedir.
El presidente de la asociación de afectados, Salvador García, insistió ayer en la necesidad de asociarse y solicitar ayudas «a las que creo que se podrán acoger bastantes afectados».
Se trata de las que prevé el Ministerio de Interior para situaciones de emergencia o naturaleza catastrófica. Las ayudas van desde los 2.580 por destrucción o daños en los enseres domésticos de primera necesidad hasta el tope de 15.120 para los que hayan perdido por completo su vivienda habitual. La horquilla de los ingresos máximos netos por unidad familiar se ajusta, considera la asociación y Servicios Sociales, a la realidad de muchos de los afectados por la explosión de Paramos. El límite de ingresos para percibir la totalidad de las ayudas en unidades de uno o dos miembros es de 10.527 euros y de 26.318 para optar al 50%. La franja de ingresos netos va de los 13.535,26 hasta los 33.838 euros en las familias con 3 o 4 miembros y, en las de más personas, de los 16.543 a los 41.357 euros. Se tomarán en cuenta para verificar estos valores, los doce meses anteriores a la explosión.
Quien lo desee puede aún acudir hoy o mañana al centro de afectados y allí se le informará puntualmente. El Concello presentará el viernes todas las solicitudes en Subdelegación de Gobierno.
La asociación, que ayer recibió la primera visita de los psicólogos de Cruz Roja, organizan una manifestación que se celebrará el 1 de julio para reclamar más agilidad ante esta tragedia. El Concello, por su parte, ha solicitado medio millón de euros a la Diputación para reponer los servicios.