Chandebrito afronta el verano con sus pastos recuperados y montes saneados

Monica Torres
Mónica Torres NIGRÁN

TUI

M TORRES

Los vecinos han vendido toda la madera quemada e iniciado la reforestación

20 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

«Todos pensamos que era o fin do mundo. Baixei da casa polo medio do lume para reunir á familia e aínda hoxe a miña filla, cada vez que mira algo de fume, quere escapar». María Piñeiro recuerda así el 15 de octubre. El relato de todos aquellos que vivieron las dos horas más negras de la historia de Chandebrito es sobrecogedor. La parroquia se tiñó de luto al paso de los devastadores incendios que esa noche se llevaron por delante la vida de Angela Otero y Maximina Iglesias así como el 99 % de sus 4,6 kilómetros cuadrados de extensión.

Las imágenes quedarán para siempre en el imaginario colectivo, pero el empeño de sus gentes ha conseguido que el pueblo renazca de sus cenizas. «Los pastos de Chandebrito ya se han recuperado y el monte comunal está ya casi saneado en su totalidad», afirma Víctor Manuel Vidal Otero. El entorno en el que el presidente de la comunidad de vecinos y de montes hace estas declaraciones refuerzan sus palabras. Sobre el terreno se sigue trabajando a destajo para frenar posibles daños colaterales pero los brotes verdes son ya prados, 220 hectáreas de montes comunales están siendo replantados tras sanear a fondo sus tierras y otras 24 de pastos lucen el color propio de la estación. Solo sobrevivieron al fuego 2 hectáreas del total de monte comunal existente.

Nadie olvida pero la contestación vecinal con los apoyos llegados también desde fuera de la parroquia en forma de conciertos, colegios que se sumaron a la reforestación y otras donaciones privadas ganaron la afrenta a las llamas. «Antes había vida en Chandebrito y ahora también. Llevamos aquí muchos años, tuvimos esta desgracia pero seguimos luchando», sentencia el representante vecinal, con los siete meses de trabajo continuo a sus espaldas. Dos familias perdieron también sus casas. La suerte quiso que en una de ellas no estuviera esa tarde su propietaria, una mujer de avanzada edad. La vivienda continúa como aquella noche, reducida a escombros.

Ese domingo negro fue especialmente cruel con Noemí Fialho y su madre, María Victoria Figueroa, dos vecinas del barrio de Pracíns que tuvieron que escapar de su casa con lo puesto cuando la policía las desalojó. «Ya no estamos en shock, pero lo que ha pasado no lo vamos a olvidar nunca», aseguró Noemí Fialho casi seis meses después a La Voz. La asociación de vecinos y de montes organizó dos conciertos solidarios y la asociación gallega de Djs promovió un tercero. Así se consiguieron los casi 10.000 euros de ayuda que se repartieron entre esta familia, a la que se le dieron 6.000 y otras las tres más. El Ayuntamiento de Nigrán, a través de la Fundación La Caixa, ha entregado esta semana otros 10.000 euros para Noemí Fialho y su madre. «Esta es una ayuda muy importante para nosotros porque partimos de cero, estamos muy agradecidas», señaló la más joven.

En un Fuenteovejuna en el que la unión, una vez más, hace la fuerza, Chandebrito ha hecho posible esta recuperación. «La gente ahora vuelve a la rutina pero también es cierto que, si volviera a pasar algo así, no se mueve nadie de aquí y eso te lo dice del primero al último de los vecinos», advierte Víctor Manuel Vidal.

La comunidad de montes ha podido vender más de un millón de árboles. «El precio ha tenido que ser mucho más bajo, casi en un 60 % del que podría haber alcanzado si no se saturara el mercado y además ahora tenemos que programar a más largo plazo porque no se podrá volver a vender madera hasta dentro de unos quince años», indica el presidente vecinal. Los 200.000 euros de esta venta son el principal colchón para la reforestación y mantenimiento de los montes comunales hasta entonces.

Las carreteras de titularidad autonómica de la comarca de O Morrazo estarán en obras a partir de mañana. La Consellería de Infraestruturas e Vivenda invertirá 600.000 euros en los trabajos de refuerzo del firme de sus viales y las obras se prologarán durante cuatro meses. Las obras se localizarán en la variante de Marín (VG-4.4), y en las carreteras PO-315 y PO-551.El proyecto incluye reparaciones del firme que permitan prolongar la vida útil de estas carreteras a su paso por los municipios de Bueu, Cangas, Pontevedra, Marín y Moaña.

La elaboración de cartografía Six, ortofotodigital, y red topográfica del municipio es el proyecto de mayor importe, 90.000 euros, solicitado por el Concello de Tui al amparo del Plan Concellos 2018-19. En concreto fueron presentados trece proyectos de inversión por un importe total de 752.383,38 dentro de la línea 1.

Se contempla la mejora de las pistas de tenis municipales en Areas, por 64.245, euros, una área recreativo en el aula de Ponte Internacional del CRA Mestra Clara Torres en las Bornetas, con una inversión de 31.495, euros o la mejora de los vestuarios en el pabellón polideportivo viejo por un importe total de 59.817 euros.

Un hombre que desapareció el viernes por la tarde en Cangas fue hallado muerto en una pista forestal del monte Facho, en O Hío. El 112 tuvo constancia de la desaparición del hombre sobre la medianoche, a través de un familiar del varón. Señalaba que el hombre, que se encontraba alojado en un hostal, salió a dar una vuelta en bicicleta a las siete y media de la tarde y que no regresó. Los servicios de emergencia pasaron el aviso al 061, a Protección Civil. La víctima es un varón de 58 años de edad. Al parecer, falleció por causas naturales.

Hay 240 hectáreas de particulares con riesgo de caída sobre las carreteras

Los montes comunales están saneados pero el estado de las otras 240 hectáreas que los circundan preocupan, y mucho, a los vecinos. «El 80 % de estas parcelas privadas están pegadas a las carreteras, ya no solo es el impacto estético porque todo sigue negro sino que los árboles así son un gran peligro porque pueden caer en cualquier momento y hasta el valor de su madera se devalúa», advierte el presidente de la comunidad de vecinos. «Es muy distinta la realidad del monte comunal que el de Tomadas», insiste el representante vecinal. Los comuneros arreglaron las canalizaciones afectadas, repartieron pasto seco para alimentar a los animales, paja para encamarlos y realizaron jornadas de concienciación.