La Xunta expedienta a Tomiño por los conciertos nocturnos en zona Red Natura

Monica Torres
m.torres TOMIÑO / LA VOZ

TOMIÑO

La ley impide usar megáfonos en el auditorio para no molestar a la fauna

07 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El Concello de Tomiño dispone del mayor auditorio al aire libre de O Baixo Miño, financiado íntegramente por el Ministerio de Cultura con 1,7 millones de euros y que tuvo el beneplácito de la Xunta. Pero cada una de las actuaciones nocturnas debe ser autorizada por el Servizo de Conservación da Natureza, al tratarse de zona Red Natura, y la ley veta el uso de megáfonos que puedan alterar a la fauna.

La Consellería de Medio Ambiente ha abierto un expediente sancionador al Ayuntamiento por la realización de actividades culturales y deportivas en este Espazo Fortaleza de Goián durante el verano pasado. La clave está en que el recinto, en la ribera del Miño, forma parte de un Lugar de Importancia Comunitaria y esta figura es, a raíz de la aprobación en marzo del año pasado del Plan Director de la Rede Natura 2000 de Galicia, «zona de especial conservación».

El reglamento, similar al que ya ha desatado la controversia en otros escenarios de España, implica que hay que contar con una autorización específica. De antemano ya prohíbe el empleo de megáfonos u otros aparatos de sonido que puedan perturbar la tranquilidad y la quietud de la fauna y del propio espacio natural a partir de las 21.00 horas, por lo que los permisos son muy restrictivos.

Un particular denunció varias actividades culturales realizadas en agosto y septiembre, y otro las cursó ante el Seprona. Ocurrió con los eventos Minho Reggae y La Festa Hortera, que se celeraron «sin contar con la autorización del Servizo de Conservación da Natureza». El expediente incluye los informes realizados por el departamento de Medio Ambiente. Uno se elaboró durante la celebración del Minho Reggae y recoge la distribución, situación y horarios del concierto. El documento señala que el recinto del festival está en zona de especial conservación y de especial protección de aves, con acceso delimitado en unos 3.000 metros cuadrados. Las actuaciones arrancaron a las diez de la noche y se prolongaron hasta la madrugada.

En el informe se plasma que no se pueden precisar los vatios de sonido ni de luz que se producen por no tener aparatos para medir. «Nuestra percepción es que la luz influye poco en la fauna del río por no haber focos dirigidos hacia el río, por lo que las riberas se encuentran a oscuras. El ruido no podemos valorarlo», señala. También especifica que los asistentes no circulaban cerca de la ribera y que la zona de acampada, con sanitarios y contenedores, estaba fuera del linde del espacio protegido. Sin embargo, considera que los hechos denunciados pueden ser constitutivos de una infracción administrativa grave por no tener autorización, sancionable con una multa de entre 6.001 a 60.000 euros.

Sobre las seis actividades programadas para agosto, el informe dice que no se solicitó autorización. En todo caso, advierten que si se hubiese solicitado algún tipo de permiso, las actuaciones «no serían autorizables».

El Concello podrá presentar alegaciones. Este periódico intentó ayer recabar una valoración, que no se produjo, del gobierno municipal de Tomiño sobre el expediente de la Xunta.