O Baixo Miño y el norte de Portugal ponen en marcha un plan piloto de bicis compartidas

María Jesús Fuente Decimavilla
maría j. fuente TOMIÑO / LA VOZ

SALVATERRA DE MIÑO

cedida

Serán eléctricas y cada uno de los seis municipios participantes de ambas orillas del Miño aportará siete

25 sep 2020 . Actualizado a las 00:23 h.

La Agrupación Europea de Cooperación Territorial del Río Miño (AECT) pondrá en marcha un proyecto piloto de movilidad transfronteriza para compartir bicicletas eléctricas entre varios municipios. Los primeros trámites ya están en marcha. En principio está previsto que participen los concellos de Tui, Tomiño, Salvaterra, Valença, Vila Nova de Cerveira y Monçao. La iniciativa pretende fomentar el aumento de la movilidad sostenible entre las localidades de la raia.

El proyecto incluye la instalación de siete bicicletas en cada una de las localidades, que llevarán incorporado GPS. Los vehículos se podrán utilizar de forma compartida entre los vecinos de uno y otro lado del Miño para circular exclusivamente en el llamado territorio de la eurociudad.

Los usuarios deberán tener una aplicación para poder hacerse con las bicicletas, que les obligará a identificarse. Una vez que se deshagan de ellas tendrán que desactivarla para que quede constancia y pueda volver a ser utilizada. Para facilitar las cosas, en esa misma aplicación se mostrarán las estaciones de aparcamiento de forma virtual en cada uno de los municipios.

Su total puesta en marcha está prevista para principios de año bajo el respaldo económico del proyecto Smart Minho, cofinanciado por el programa europeo Interreg.

 Visto bueno

Los concellos implicados tendrán que darle el visto bueno antes de iniciar los trámites. Hoy lo hará el pleno de Tomiño y el lunes el de Salvaterra, a los que seguirán el resto. En todos los casos se espera que reciba luz verde, teniendo en cuenta el beneficio que supondrá para la población. Las administraciones locales solo tendrán que aportar a la iniciativa en torno 7.500 euros al contar con financiación europea.

La idea de las bicis compartidas entre ambas márgenes del río Miño se viene fraguando desde hace tiempo. De hecho, el secretario técnico de la Agrupación Europea de Cooperación Transfronteriza Río Miño ya visitó hace un año el municipio portugués de Águeda para conocer sobre el terreno el proyecto de movilidad sostenible desarrollado por esa administración local, una de las primeras en poner en marcha el alquiler de bicicletas eléctricas.

La visita se completó con otra realizada a Puebla de Sanabria y fue tras estudiar ambas, cuando se inició el estudio de la gestión de este servicio para trasladarlo a la zona del río Miño transfronterizo y su posible impacto sobre la mejora de la movilidad.

Una de las actuaciones recogidas en el proyecto institucional Smart Minho es precisamente la puesta en marcha de experiencias de movilidad saludable entre ambas orillas con el objetivo de aumentar la movilidad local transfronteriza.