El parque A Canuda, de Salvaterra, recibe tantas visitas como las Cíes

María Jesús Fuente Decimavilla
María J. Fuente SALVATERRA / LA VOZ

SALVATERRA DE MIÑO

CEDIDA

El secreto del éxito está en el entorno y en la variada oferta de ocio para todas las edades

14 ago 2020 . Actualizado a las 01:38 h.

Es cuando menos curioso que el parque de un municipio de diez mil habitantes reciba tantas visitas al año como las islas Cíes, emblema del Parque Nacional das Illas Atlánticas. En ambos casos rondan las 300.000 visitas anuales.

Y es que A Canuda, en Salvaterra de Miño, no es un parque al uso con el típico formato. Sus 200.000 metros cuadrados dan para mucho. Dan para circuito vial con señales de tráfico (uno de los primeros que se puso en marcha), gimnasio al aire libre, huerta con productos típicos del entorno, un lago con barcas, zona de animales, merendero... En definitiva, un espacio de ocio para todas las edades.

«Es un referente en el área de Vigo y, en general, en el sur de la provincia y norte de Portugal. Hay que tener en cuenta que el puente que nos une con Monçao lo cruza una media diaria de 10.000 vehículos», explica la alcaldesa Marta Valcárcel.

Además de las visitas particulares, son muchas las organizadas desde centro educativos, asociaciones de todo tipo y la Diputación.

En el éxito del parque tiene mucho que ver el entorno en el que está situado, junto al paseo fluvial del Miño, y el espacio termal, al que se suman más de 30 kilómetros de sendas verdes que transcurren junto al río.

«En realidad es un conjunto con muchos atractivos, como el recinto amurallado y el museo del vino», añade Valcárcel. Reconoce que A Canuda es el reflejo de un trabajo progresivo de muchos años.

Inaugurado en septiembre de 1992 tras ocho años de obras, la mayor ampliación tuvo lugar en el 2007, cuando la superficie sumó otros 80.000 metros cuadrados. «Es un trabajo de muchos años para poner en valor el entorno, completado con otras acciones como la plantación de mil árboles en el casco urbano. Cuando una persona viene por primera vez queda sorprendida de la urbanización, el clima y el entorno bañado por cinco ríos», destaca la alcaldesa.

Aprovechando que en la actualidad se encuentra cerrado como consecuencia de la pandemia, se pondrá en marcha una nueva actuación de mantenimiento en la que se invertirán 50.000 euros, 34.000 aportados por la Xunta.

Las obras incluirán la restauración de la zona de juegos, deteriorada por el paso del tiempo, las inundaciones y el uso, así como la incorporación de nuevos juegos, entre ellos una tirolina de madera y una pirámide de dos metros y medio de altura.

De momento el gobierno local desconoce cuándo se podrá volver a disfrutar de las instalaciones al depender de cómo evolucione la pandemia.