
Xunqueira Ézara es jefa en la empresa Sener Aeroespacial de un programa para desorbitar satélites y eliminarlos en las capas altas de la atmósfera
12 jun 2024 . Actualizado a las 01:39 h.«Cada año se lanzan más satélites, y en general de tamaños más pequeños, porque el acceso al espacio es ahora más sencillo. Eso está provocando un efecto en cascada porque no estamos haciendo un uso sostenible del espacio», explica Xunqueira Ézara. Esta joven ingeniera aeroespacial de Redondela es, con 27 años, la jefa de un proyecto de limpieza de basura espacial en el que participa la empresa Sener Aeroespacial.
Hace cuatro años que Ézara trabaja para esta compañía de ingeniería pionera en el diseño de tecnología satelital y equipos para la exploración espacial. E.T. PACK-Fly es el nombre del proyecto comandado por la Universidad Carlos III de Madrid, en consorcio con Sener Aeroespacial, la Universidad Técnica de Dresde, la de Padua y la startup alemana Rocket Factory Augsburg (RFA), que cuenta con una financiación de 2.5 millones de euros del Consejo Europeo de Innovación. Desarrollan una nueva tecnología conocida como amarra espacial electrodinámica que produce una fuerza que provoca la reentrada del satélite y su eliminación en las capas altas de la atmósfera. El próximo año se pondrá en órbita para demostrar sus prestaciones.
Desde que el ser humano comenzó a explorar el espacio, también empezó a ensuciarlo. Todos estos residuos, apunta Xunqueira Ézara, «pueden provocar colisiones con otros satélites que afecten a su funcionamiento». No solo se lanzan cada año más satélites sino que, debido al alto coste que supone, la mayor parte no son retirados una vez finalizada su misión.
El equipo en el que trabaja la redondelana permite sacar de órbita a los satélites de vida útil vencida valiéndose de un tether, que es una innovadora tecnología que los empuja para eliminarlos durante su reentrada en la atmósfera. «Nuestro sistema es un cubesat con dos módulos unidos que, al desplegarse, sueltan el tether, que es una especie de lengua o hilo de aluminio y que, al interactuar con el plasma del espacio, genera una fuerza electromagnética conocida como de Lorentz», indica. Esa fuerza es la que desorbita el satélite, añade, hasta forzar su reentrada en la atmósfera terrestre y su eliminación por el calor que se genera durante este proceso.
Xunqueira Ézara, trabaja en la empresa de Madrid desde que acabó el máster. Es también la responsable técnica de Aerial, el proyecto adjudicado por la Agencia Espacial Europea (ESA) a Sener Aeroespacial, cuyo objetivo es diseñar un vehículo aéreo no tripulado o dron capaz de volar en la atmósfera marciana de bajas densidades, presiones y temperaturas.
La redondelana se muestra entusiasmada con su trabajo y el equipo humano con el que comparte proyecto. Sigue trabajando a diario para conquistar el sueño que la llevó a la carrera de ingeniería aeroespacial «porque quiero llegar a ser astronauta».
El próximo año lanzarán su satélite para probar el sistema que pretende ayudar a reducir el impacto del hombre en el espacio durante próximas misiones. El siguiente paso, añade, será que, en el futuro, su kit de desorbitado, pueda engancharse a satélites principales que se lancen desde la tierra para que cuando concluyan su misión en el espacio los ayude a desorbitar.
Este sistema de amarre que ultima Sener Aeroespacial tiene un gran potencial para ayudar a atajar este creciente problema que se enfrenta a nivel mundial, porque otros proyectos de desorbitado usan propulsión convencional, lo que incrementa los costes. «A diferencia de otras tecnologías convencionales, el E.T. PaACK-Fly no necesita combustible propulsante gracias a la fuerza que produce la amarra electrodinámica, minimizando a la vez el impacto ambiental y diseñando un kit menos pesado, algo que es especialmente importante a la hora de lanzar satélites al espacio» señala la ingeniera.