AER pone precio a su apoyo en Redondela: la alcaldesa del PSOE debe firmar ante notario que pagará una multa de 100.000 euros si incumple el pacto

Luis Carlos Llera Llorente
luis carlos llera VIGO / LA VOZ

REDONDELA

M.MORALEJO

La izquierda encarrila un gobierno cuatripartito en Cangas encabezado por el BNG

08 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Los nuevos gobiernos municipales de Redondela y Cangas parecen encarrilados. Seguirán en manos progresistas si no se produce una sorpresa de última hora. Los partidos de izquierda de las dos villas, las más pobladas del área metropolitana de Vigo, negocian sendas alianzas para cerrar el paso al Partido Popular, a pesar de que esta formación es la que obtuvo mas votos en los dos municipios.

La Agrupación de Electores de Redondela (AER) ha decidido levantar el veto a la socialista Digna Rivas, que seguirá siendo alcaldesa si fructifican las negociaciones. Eso sí, le ponen condiciones: a cambio de la concejalía de infraestructuras, votarán por ella siempre y cuando firme ante notario que pagará una multa de 100.000 euros si no cumple el programa.

En la última legislatura, la alcaldesa les quitó las competencias de Medio Ambiente al concejal de AER, tras la polémica por la limpieza de las playas. Ese fue el momento de mayor tensión y la raíz de la negativa inicial del grupo para sentarse a negociar con ella. Rivas quitó las competencias al edil Roberto Villar, que defendía una prácticas ecologistas en la limpieza del arenal de Cesantes y se encontró con la oposición de vecinos que querían el arenal impoluto limpiándolo con máquinas.

Tras los resultados del 28M, AER vetó públicamente a Rivas, pero el secretario provincial del PSOE no lo aceptó el veto y la formación ha acabado cediendo para que no gobierne el Partido Popular. José Carlos Orge, de AER, aseguró ayer que están dispuestos a entrar en un gobierno de izquierdas con los otros partidos. La agrupación electoral se define como un partido de izquierdas, aunque en su día dejó que gobernará Javier Bas, como lista más votada. Ahora parece complicado que se repita esta opción, aunque no se puede descartar ya que AER tiene la llave del gobierno local y va a imponer duras condiciones al PSOE para cerrar un pacto. Previamente, hubo un encuentro de cortesía con el PP. Los resultados en los pasados comicios dieron a Javier Bas (PP) 6.920 votos, el 44,5 %, pero insuficiente para lograr una mayoría. La suma de PSOE, BNG y AER podría lograr esa cifra necesaria para gobernar.

LUIS CARLOS LLERA
 

Cuatripartito cangués

La entente de Cangas se da por segura. Ayer por la mañana mantuvieron una reunión a cuatro bandas en la Cámara Agraria el BNG, el PSOE, Alternativa dos Veciños y Esquerda Unida. Todas las formaciones están de acuerdo en unas líneas programáticas comunes y en sus prioridades de gobierno. Son «aprobar un Plan Xeral de Ordenación Municipal e sacar adiante os orzamentos municipais do ano 2023, que aínda non se aprobou, e os do 2024. Tamén reivindicar melloras na sanidade pública da vila», manifestó Oliver Martínez, del BNG.

El previsible cuatripartito quiere suturar las heridas que acabaron rompiendo el gobierno saliente, encabezado por Victoria Portas. Las fricciones entre su grupo y la exconcejala de Cultura, Servicios, Energía y Turismo, Aurora Prieto, que luego acabó presentándose por Esquerda Unida a las elecciones, provocaron una ruptura en diciembre del año pasado. Ahora todos quieren pasar página y para eso han establecido una comisión negociadora del pacto que daría la alcaldía a la candidata del BNG, Araceli Gestido.

En la reunión celebrada ayer hubo buena sintonía entre los cuatro partidos. Por parte del Bloque Nacionalista Galego acudieron a la cita Oliver Álvarez y Leonor Torres; el PSOE estuvo representado por Carmela Carrillo y Hugo Fandiño; Alternativa dos Veciños estuvo presente con Iris Cordeiro y Salvado Pazó, mientras que Esquerda Unida envió a Manuel Sotelo y Loli Piñeiro. En la negociación no se habló de personas concretas ni de vetos. «Non hai líneas vermellas», aseguró el concejal Adrián Pena, que ha quedado fuera del Concello tras las elecciones del 28 de mayo y que negocia en nombre de su partido, Alternativa dos Veciños.