Redondela debe mejorar el acceso a la autopista para desarrollarse

l.c.ll. redondela / la voz

REDONDELA

El plan estratégico para el 2020 advierte que la ampliaci´n de Rande es una oportunidad

17 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Redondela debe mejorar la accesibilidad a la autopista AP-9 para ser competitiva, según la consultora Eosa. Es una de las directrices de un plan estratégico encargado por el municipio con el horizonte del 2020. Fuentes de la propia Audasa reconocen que la ampliación del puente de Rande podría ser una oportunidad para mejorar esa conectividad ya que los conductores que se dirigen a Pontevedra desde Redondela tienen que llegar hasta las torres de Padín para tomar la autopista en dirección Pontevedra. Ello dificulta el tránsito de coches y también de vehículos pesados que tienen que recorrer buena parte de Chapela generando molestias a los vecinos. Y es que en esta parroquia se sitúan algunas empresas muy importantes del municipio como la propia Pescanova, cuyos accesos son muy deficitarios. En su día se pudo preservar una franja costera para facilitar el acceso a estas factorías pero a día de hoy parece inviable.

Igualmente, la falta de una autovía alternativa hace que el tráfico pesado de camiones a su paso por Redondela sea muy alto. El 14 % del tráfico procedente de O Porriño es de vehículos pesados. De ahí la necesidad de construir la autovía alternativa A-57.

La consultora Eosa, encargada del diagnóstico de la movilidad en el área, pone de relieve el intenso tráfico que tiene que soportar la carretera costera entre Vigo y Redondela, la N-552 que alcanza una intensidad media diaria de 14.877 vehículos. Estos usuarios pagan religiosamente los 0,90 euros que cuesta el peaje. La empresa de autopistas ha decidido no subirlo este año después del malestar generado por las obras entre los vecinos.

El Ayuntamiento lleva años reclamando que se levante el peaje para acceder a su municipio. El pago por los apenas tres kilómetros que separan Vigo de la entrada de la N-552 es objeto de quejas por parte de los vecinos que piden un trato similar al que se dio a los vecinos de O Morrazo. Pero en aquel caso la presión social fue decisiva y en el de Redondela no ha habido apenas protestas ciudadanas.