El Concello de Ponteareas ve imposible regularizar urbanísticamente la discoteca precintada

c. ponce PONTEAREAS / LA VOZ

PONTEAREAS

XOAN CARLOS GIL

La Policía Local constata que no se celebró la fiesta de Reyes pese a la rotura del precinto

17 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El gobierno municipal de Ponteareas ve inviable regularizar urbanísticamente la sala Bonaparte, la discoteca que lleva precintada desde el 30 de diciembre. «Está en una zona verde y con el nuevo PXOM es imposible que tenga licencia urbanística», asegura la concejala de Seguridad Ciudadana del Concello, Vanesa Fernández. El gobierno insiste en que no es posible tramitar la licencia de este local, uno de los referentes de la movida nocturna en Ponteareas.

El Concello decidió cerrar el local después de que la Policía Local informase sobre el incumplimiento de horarios y los numerosos altercados que se producen en los alrededores del establecimiento. Pero la causa principal de esta decisión es la falta de legalidad urbanística.

Pese a que existe una orden de cierre, la sala Bonaparte abrió sus puertas en Fin de Año para celebrar la fiesta que tenían programada, violando así la resolución del gobierno municipal. Esto provocó que el Concello tramitase una denuncia, y ahora está a la espera de la resolución judicial para ordenar el cierre definitivo del local o imponer la sanción económica correspondiente. Todo esto ya se le explicó a los propietarios. Hubo una desobediencia a la autoridad», insiste Vanesa Fernández.

Pese a que el gobierno también había asegurado que Bonaparte había abierto en la noche de Reyes, la fiesta del 5 de enero no se celebró, tal y como defendían los propietarios. «Hay un informe de la Policía Local que dice que los precintos estaban rotos pero no se constató ninguna actividad», asegura ahora la concejala, que considera que la rotura del precinto pudo deberse a algún acto vandálico.

Quejas

Antes de precintar el local, el gobierno asegura haber recibido numerosas quejas vecinales derivadas de ruido en las calles, incumplimiento de horarios por parte del local, rotura de mobiliario urbano, conductores que hacen trompos en la carretera donde está situada el Bonaparte, vasos y botellas en las calles... La concejala asegura que todos estos altercados llevan años denunciándose, pero que el anterior gobierno del Partido Popular decidió hacer oídos sordos y no tomar medida alguna contra el establecimiento.

Todo está pendiente ahora de lo que decidan los tribunales. Mientras, Ponteareas se ha quedado sin una de sus discotecas con mayor afluencia.