Un estudio revela la fuga de compradores de menos de 45 años hacia Vigo, en especial al centro comercial Gran Vía
22 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Ponteareas fue durante décadas el referente comercial de la comarca de O Condado y de A Paradanta. Las tiendas, la plaza de abastos y el mercadillo bullían de actividad. Pero en los últimos años se ha producido una decadencia que se nota en las principales calles comerciales. Y esto repercute también en la hostelería y en la economía en general de un municipio que cuenta con poca actividad industrial comparada con sus vecinos de O Porriño y Mos.
Por eso, el Concello de Ponteareas se ha puesto las pilas con la noble intención de desarrollar un plan estratégico para recuperar el alicaído comercio. Ha encargado un estudio a una consultora, Nortec, que ha analizado en profundidad la situación y los retos que hay que asumir para mejorar. Esta empresa es la autora de numerosos planes de dinamización del comercio.
Las encuestas realizadas a pie de calle con cientos de compradores, comerciantes y hosteleros han revelado que existe una importante fuga de potenciales compradores hacia Vigo. «La fuga de gasto se agudiza en los menores de 45 años que compran preferentemente en centros comerciales, especialmente en el Gran Vía de Vigo».
El Concello aconseja a los comerciantes y hosteleros a aglutinarse en un único ente para realizar promociones conjuntas, abaratar costes y retener a clientes que acuden a la metrópoli.
En el municipio existen dos asociaciones de comerciantes. La pionera es Ponteareas Comercial, presidida por la polifacética Isabel Blanco-Rivas, abogada, escritora y propietaria de una tienda de instrumentos y productos tradicionales gallegos. Desde 1987 la asociación lleva a cabo iniciativa para impulsar el sector. Cuenta con 80 comercios asociados
A pocos metros de esta tienda se encuentra la moderna boutique de Lina Limeres, una madrileña cuya familia es originaria de As Neves y que regresó a O Condado para impulsar su propio proyecto. Limeres creó hace cinco años la Asociación de Comerciantes Tea, que puso en marcha a final de verano la feria outlet para dar salida a prendas de temporada que no lograron venderse durante el año. Esta entidad ya cuenta con 69 asociados. «Hacer una federación es viable. Hay que resurgir de la crisis, que Ponteareas vuelva a ser la que fue», dice Limeres.
El presidente de la Asociación de Hosteleros de O Condado, Isidora Pino señala que «desde hace dos años se ha producido una gran bajada en el sector de la hostelería de Ponteareas. Antes venía mucha gente de Covelo y de otros municipios. Ahora se han multiplicado los controles de alcoholemia y la gente tiene miedo a desplazarse hasta aquí». Pino dice que «la unión hace la fuerza» y considera que hay que organizar eventos todos juntos.
La crisis del sector se evidencia en locales cerrados y otros que se han adaptado al momento, como una joyería de la plaza Mayor que ahora vende hasta botellas de champán. Y es que su propietario tenía, además de la joyería, una tienda de delicatesen y tuvo que cerrarla. La gente no está para florituras en la cesta de la compra.
Los clientes de Ponteareas reclaman más surtido, más establecimientos de cada ramo y un horario más amplio. También piden la apertura de los sábados por la tarde. La hostelería tampoco sale demasiado bien parada. Los encuestados se quejan de la falta de variedad de locales donde tapear y comer. Además, dicen que los locales son ruidosos y que el trato personal debería mejorar.
El comercio y la hostelería están sufriendo en las últimas décadas un desplazamiento que afecta especialmente al casco antiguo. Esta traslación está motivada por el movimiento de servicios e infraestructuras a zonas con mejores condiciones, por ejemplo el entorno de la estación de autobuses, donde los edificios son modernos. Esa zona, del Paseo Matutino constituye el ensanche de la ciudad y oferta locales más baratos y con mejores prestaciones. Castelao es otro de los ejes. Isabel Blanco-Rivas señala que uno delos problemas del municipio es que el comercio está muy disperso a diferencias de otras localidades, como O Porriño o Redondela, donde está muy concentrado. La presidenta del centro comercial abierto cree que hay que ayudar a los emprendedores.