Arranca la primera intervención en el castro de Cano dos Mouros de Oia

Monica Torres
Mónica Torres OIA / LA VOZ

OIA

CEDIDA

La prioridad es limpiar el conjunto y asegurar el petroglifo Auga de Cebros

22 sep 2015 . Actualizado a las 09:31 h.

La comunidad de montes de Viladesuso busca voluntarios «con fouce e angazo» para la primera prospección y limpieza en el Castro de Cano dos Mouros. El proyecto arranca con la prioridad de limpiar el yacimiento para registrar las estructuras visibles y hacer el plano topográfico, según avanzó Xosé Gago, coordinador del proyecto Costa dos Castros. El sábado habrá una jornada de puertas abiertas para que todo el que quiera iniciarse en el mundo de la arqueología activa.

Se trata de la segunda gran acción arqueológica del proyecto Costa de los Castros. En agosto los trabajos se centraron en el castro de la Cabeciña , en Mougás y ahora le toca a Cano dos Mouros explica Xosé Gago, coordinador de Costa dos Castros. Este castro se encuentra aprovechando un promontorio a aproximadamente 300 metros de altura que domina parte de la costa de Oia. «Antes de nada tenemos que ver lo que hay debajo del tojo. Luego valoraremos si interesa su excavación o no, pero el hecho de tenerlo limpio, facilita que sea un elemento visitable. Un castro limpio es un castro feliz», dice.

A un nivel más arqueológico se pretende comprobar las similitudes que había podido tener Cano dos Mouros con el da Cabeciña, situado a poco más de 2 kilómetros de distancia m en línea recta. «A simple vista, por la forma y el emplazamiento parecen castros muy semejantes» dice Carlos Otero, director arqueológico de la intervención. La limpieza «nos va a permitir comprenderlo mejor, podremos comprobar si la muralla también es escalonada como en la Cabeciña, por ejemplo. La limpieza es necesaria para poder registrar las estructuras visibles y hacer el plano topográfico, insiste el arqueólogo.

Esta primera acción sobre Cano dos Mouros permitirá por lo tanto saber más sobre sus características al tiempo que se incide en el valor turístico del castro, situado en el camino de senderismo de la Ruta Mágica y con unas vistas espectaculares sobre el océano Atlántico. «Queremos recuperar esa sensación de los trabajos comunales del campo, que la gente suba con una hoz y un angazo a ayudar a limpiar el castro. Luego habrá tiempo para disfrutar de este lugar mágico y la puesta de sol», señala Gago.

También se pretende dotar al lugar de una fiesta propia, una fecha que se asocie con subir al castro. A este respecto, Xosé Gago informa de que hay una leyenda alrededor de una de las piedras del promontorio en el que se sitúa el castro, llamada popularmente la silla del Rey Sol, según la cual, el Rey Sol se sentaría todas las tardes en esa piedra a mirar las puestas de sol.

Uno de los proyectos que más precisa de una intervención es el de Agua de los Cebros, el del barco, un elemento único en toda la costa atlántica europea. Este tesoro arqueológico se encuentra en la parroquia de Pedornes, una de las más castigadas por los fuegos de 2006, por lo que no puede hacerse cargo por sí misma de esta joya. Por ello, y dentro de la campaña de crowdfunding con la que financian estas campañas, han hecho una línea directa.