La última campaña remata con la identificación plena del conjunto
06 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La excavación que esta semana ha terminado en el castro de A Cabeciña ha conseguido datar las estructuras localizadas anteriormente con mayor precisión, confirmar las fases de ocupación y averiguar las funciones de los distintos edificios. Ese era el principal objetivo de esta tercera campaña del Proyecto Mougás, promovida por la comunidad de montes. Pero igualmente importante para los organizadores es la ocupación actual del castro. «Nuestra idea es hacer que la arqueología sea accesible y, a la vez, fomentar las visitas a la zona», recuerda Xosé Gago, coordinador del proyecto Costa dos Castros.
Durante este último mes de sondeos, decenas de personas pudieron seguir a pie de campo los trabajos realizados por los expertos. Sobre él ha intervenido un equipo integrado por quince arqueólogos de Inglaterra, Canadá y otras partes de España así como diez voluntarios, estudiantes de diversas nacionalidades también.
Sobre la parte estrictamente arqueológica, el éxito principal «ha sido el poder identificar, limitar y contextualizar una cabaña de la Edad del Hierro». Xosé Gago explica que esta labor es la que permite, al haber definido todos los muros del aterramiento e incluso el patio de la vivienda, profundizar en el estudio sociológico de la época. «Ahora sabemos que el castro es más monumental; no en lo relativo al tamaño, sino a lo pétreo ya que son de gran volumen tanto los de la cabaña como los del aterramiento y los de contención».
El equipo acabará estos días de cubrir la zona de trabajo con una tela geotextil para asegurar su preservación hasta la actuación prevista el año que viene. «Esta tela preserva el conjunto, permitiendo que el agua filtre los restos y nos indica dónde ha acabado esta intervención», indica Xosé Gago. En el 2016, el equipo volverá de nuevo a A Cabeciña para proceder a la restauración de esta cabaña.
Su verano arrancó en Inglaterra, en la zona de Leinstong. Los arqueólogos españoles trabajaron también allí en la última fase de la intervención que se centra en la recuperación de una abadía medieval. Rematarán la época estival en el castro de Chavella, el segundo de los tres de Oia, que forma parte del proyecto Costa dos Castros.
«En Chavella se van a hacer los primeros sondeos valorativos, también con el apoyo y la financiación de la comunidad de montes de Mougás», avanza Gago. Los profesionales intentarán arrojar luz sobre las características de este poblado de la Edad de Hierro y la expectación se centra en poder confirmar las hipótesis que sitúan en la zona una torre medieval.
Al frente de los trabajos que ahora culminan y que se realizaron durante el verano estuvo Carlos Otero Vilariño, director arqueológico y, como asesora de conservación Yolanda Porto. Forman parte del equipo de especialistas el arqueólogo Israel Alcón y los ingleses John Etté y Sarah Buckingham.