Primera selectividad en O Porriño: «El sol hace efecto invernadero y pasamos un poco de calor por la tarde»

Laura Amoeiro, S. C. O PORRIÑO / LA VOZ

O PORRIÑO

Un alumno coge agua de la nevera instalada en el pabellón de O Porriño durante esta selectividad
Un alumno coge agua de la nevera instalada en el pabellón de O Porriño durante esta selectividad M.MORALEJO

Los 214 alumnos de la localidad y de Mos se reparten en dos pabellones. Ganan en cercanía a sus casas, pero faltan servicios

09 jul 2020 . Actualizado a las 16:53 h.

O Porriño es uno de los diez municipios gallegos que este año acoge la celebración de las pruebas de selectividad por primera vez o, como en el caso de Vilagarcía, después de décadas de traslado de los estudiantes a Santiago o Vigo. En los dos pabellones del polideportivo de O Porriño se han repartido 214 jóvenes: los estudiantes del IES de Mos y el colegio Los Sauces en uno y el alumnado de los centros Lar, Ribeira do Louro y Pino Manso en el otro. Es una de las novedades que trajo el covid-19 y tiene ventajas e inconvenientes. La descentralización es cómoda porque en general los estudiantes tienen más cerca sus casas, pero el presidente de la comisión 20B, Manuel Besada, afirma que «faltan servizos, como unha cafetería», aunque este año en las facultades la cantina permanece cerrada. 

«Los veo muy tranquilos y muy centrados»

Para Yang Liu, un estudiante de Los Sauces, la ubicación es adecuada para él, ya que vive cerca de las instalaciones donde tienen lugar los exámenes. No obstante, señala que «no lo es para todos sus compañeros», puesto que comparte clase con jóvenes de sitios que tienen que desplazarse desde zonas como A Guarda. Teresa Pérez, miembro de la comisión, incide en que «así como otras veces he visto más nervios, los veo muy tranquilos y muy centrados», tal vez por encontrarse en un lugar conocido. Enrique Pereira, alumno del IES Pino Manso, supo hace tres semanas que la ABAU se realizaría O Porriño, y considera que es correcto puesto que «se evita la masificación del campus», aunque de la misma manera alega que en la universidad hay aulas suficientes ahora que no tiene a sus estudiantes habituales..

«Dentro del polideportivo se cumple, pero fuera hay mucha gente sin mascarilla»

Respecto a las medidas de seguridad, Yang Liu asegura que «no se cumplen al 100 %», como ocurre fuera del pabellón. Coincide con él Manuel Bouzas, profesor de Lingua Castelá e Literatura del IES Pino Manso. El docente afirma que dentro de las instalaciones se garantizó el cumplimiento de la seguridad entre los alumnos, pero fuera «hay mucha gente sin mascarilla, lo mismo que se ve por la calle, por la sensación de que es verano y lo peor ya pasó». La conclusión de Yang Liu y Manuel Bouzas la repite Enrique Pereira: dentro del pabellón asegura que se han cumplido las medidas de seguridad, pero fuera «los grupos de amigos estamos siempre juntos» explica.

A tanta distancia que nadie copia

Este año, la distancia social que obliga la amenaza del covid dificulta que los estudiantes copien en los exámenes. En estas dos primeras jornadas en O Porriño todavía no se ha pillado a nadie: «La separación no lo permite», explica Teresa Pérez.

«En este pabellón, al tener claraboyas, el sol hace efecto invernadero»

Para sofocar el calor de estas jornadas, ambos pabellones disponen de neveras con botellas de agua. Pérez afirma que en uno de los recintos se pasa calor: «En este pabellón, al tener claraboyas, el sol hace efecto invernadero y pasamos un poco de calor por la tarde». A la vez cree que disponer de tanto espacio es acertado, no solo para el alumnado sino también para el profesorado, puesto que «los alumnos están muchísimo más separados y el coronavirus está mucho más controlado al tenerlos ubicados adecuadamente». En las instalaciones del polideportivo afirma que «se cumplen las medidas en todos los aspectos».