La Policía Local consiguió localizar el vehículo «que hacía zigzag y a veces invadía el carril contrario» gracias a un vecino
06 oct 2018 . Actualizado a las 06:00 h.La alerta de un conductor ha permitido que la Policía Local de O Porriño pudiera interceptar un vehículo en la Nacional 550 y salvar a la piloto, que era una madre que casi multiplicaba por cuatro la tasa de alcoholemia permitida legalmente y a su hijo, menor de edad.
Una persona advirtió ayer, a las cinco y veinte de la tarde, mediante una llamada a los agentes de que estaba detrás de un vehículo que circulaba en zigzag y que, a veces, llegaba a invadir el carril contrario. Para poder localizar de inmediato el vehículo, la policía mantuvo la conexión telefónico con el samaritano que les avisó del riesgo y así consiguieron interceptar el coche. En su interior había un niño de doce años, hijo de la conductora, «una mujer de 52 años que mostraba claros síntomas de encontrarse bajo la influencia de bebidas alcóholicas, teniendo que ser agarrada algunas veces para que no cayera», explicaron los policías.
Las pruebas concluyeron que la tasa multiplicaba casi que por cuatro legalmente establecida, por lo que se investiga a la mujer por la presunta comisión de un delito contra la seguridad vial. A la vista del estado de embriaguez de la conductora, los agentes realizaron gestiones para llevar al menor con un familiar y, al mismo tiempo, procedieron a inmovilizar el coche en el lugar de los hechos. Desde la Policía Local se subraya el hecho de que esta intervención fuera realizada gracias a la colaboración ciudadana que, asegura, «es fundamental en situación como esta para evitar que conductas semejantes puedan causar un accidente con graves consecuencias»