Continúan apareciendo restos de lápidas detrás del colegio público Antonio Palacios de O Porriño

a.m. O PORRIÑO / LA VOZ

O PORRIÑO

cedida

Son de un vertido detectado en primavera

06 sep 2018 . Actualizado a las 22:43 h.

La aparición de restos de lápidas volvió a generar ayer mucha alarma en Torneiros, pero el presidente de la comunidad de montes, Javier Soliño, aclaró que corresponden a un vertido que fue denunciado el pasado mes de abril.

Los escombros que parecen pertenecer a un cementerio se encuentran en una finca de propiedad comunal ubicada detrás del colegio Antonio Palacios. El responsable de la comunidad de montes explica que los restos aparecieron después de desbrozar una parte de la finca. Al retirar la maleza, salieron a la superficie, por lo que descartan la posibilidad de que se hayan producido nuevos vertidos. Algunas piezas se encuentran enterradas y mezcladas con otros desperdicios. La comunidad de montes no descarta que estas lápidas puedan proceder de alguna marmolería, aunque lo que causa extrañeza es que en algunas se adivinan restos de inscripciones e incluso fotografías antiguas. En cualquier caso, creen que el responsable tiene que haber sido un particular, que por no pagar el canon de vertidos autorizados se limita a depositar escombros como estos arriesgándose a recibir una sanción.

Los comuneros son los propietarios de este terreno tras haberla reclamado por la vía judicial. Anteriormente el Concello de O Porriño hacía uso de ella para el depósito de tierras y de restos de obras.

Acuerdo

Los propietarios han llegado a un acuerdo con la empresa Narom, a quien ceden el espacio para el depósito de tierras de diferentes trabajos de obra pública como, por ejemplo, la instalación de la red de abastecimiento de agua potable que se están ejecutando en el barrio de Contrasto. De esta forma, esperan volver a tapar estos restos funerarios.

Vecinos de Torneiros denunciaron el pasado mesde abril los escombros en esta zona limítrofe con el colegio. Llevaban meses obervando como llegaban camiones casi a diario para depositar escombros. La alcaldesa, Eva García de la Torre, ordenó entonces la retirada y limpieza de los materiales y ordenó a la Policía Local que realizara una investigación. La misma regidora valoraba que se trataba de «una falta de respeto» el abandono de este tipo de residuos, al margen del problema medioambiental que supone.

La inquietud entre los ciudadanos ha vuelto a surgir, pero en este caso el Concello no abrirá ninguna investigación al tener la certeza de que se trata de una parte del vertido que había quedado enterrada cuando se denunciaron los hechos durante la pasada primavera.