La empresa de Nigrán Uarx Space lanza una campaña para apadrinar los diez satélites universitarios que lanzarán al espacio a finales del 2023
10 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Uarx Space, empresa de Nigrán especializada en el desarrollo de vehículos espaciales, promueve un proyecto que permitirá a doscientos alumnos de diez universidades españolas construir y lanzar sus propios satélites. El programa tiene respaldo de la Xunta y de varias empresas, pero la inversión prevista es de 550.000 euros y precisan vías de financiación. Por ello han lanzado una campaña de crowdfunding o micromecenazgo. Todas las personas que puedan y quieran contribuir a la causa, podrán ver su nombre escrito en una insignia de níquel que se pondrá en órbita a la vez que los cubesat que, con distintos fines, construirán los universitarios.
Yanina Hallak, fundadora y CEO de UARX Space, Andrés Villa, responsable tecnológico de la compañía, y Magaly Belfort están detrás del Desafío Europa al Espacio, proyecto con el que quieren promocionar y respaldar las carreras técnicas Steam, acrónimo que agrupa ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas. Fueron 24 las universidades españolas que se postularon para participar y un jurado internacional seleccionó los diez ganadoras.
Tarjeta de embarque
Las personas que quieran ayudar a estos estudiantes a participar en una misión espacial real pueden elegir el nombre que deseen que sea acuñado en níquel y que será enviado al espacio con los satélites de la misión a finales del año que viene. En la web www.eu2space.com se encuentran todos los detalles del desafío y las diferentes formas de colaborar. Puede ser gratis, con una tarjeta de embarque digital interactiva que acredita que el nombre elegido volará al espacio en formato digital, o a partir de 25 euros, dependiendo de que se elija la opción astronauta, la de comandante o la de piloto, en función de la aportación. La recompensa, además del grabado en la moneda conmemorativa, es mayor también según el nivel.
Los satélites del desafío y de la insignia serán enviados a una órbita baja de la Tierra, a unos 600 kilómetros. Los promotores explican que el níquel no se degrada y que la tecnología empleada les permite almacenar más de 2.000 páginas de texto por centímetro cuadrado. «Podremos grabar más de 20.000 nombres que viajarán al espacio», explican. En los primeros días de campaña ya han conseguido medio millar de colaboradores.
En la web se pueden consultar todos los proyectos con desafíos beneficiosos para la humanidad. Convertir energía eléctrica en cinética, detectar la basura espacial con señales de satélites ya existentes o el estudio de la protección contra radiaciones son algunos de ellos.