Cuatro «chukis» niegan ser una banda que daba palizas en A Ramallosa en el 2015

e. v. pita VIGO / LA VOZ

NIGRÁN

PITA

Una víctima: «Sentí patadas en la cabeza y se me vino una avalancha de veinte jóvenes»

16 feb 2021 . Actualizado a las 17:20 h.

Cuatro acusados de pertenecer a la banda juvenil de los Chukis y dar una paliza a dos jóvenes en la rotonda de una discoteca de A Ramallosa, en Nigrán, negaron ayer en el juicio ser los famosos pandilleros vigueses. La agresión fue el 27 de septiembre de 2015. Pese a la insistencia del fiscal en vincularlos a los Chukis, se declararon inocentes y aseguraron que no se conocen entre sí, ni forman un grupo ni pegan a la gente para robarles.

«Los Chukis eran chavales que entonces tenían 14 o 15 años, ahora tendrán 18 o 20, y yo tengo 25», explicó uno de los acusados, que vino escoltado desde la prisión de A Lama. El juicio se celebró ayer en el Juzgado de lo Penal número 3 de Vigo. La sala estuvo a punto de superar el aforo de covid por el alto número de abogados de la defensa y la acusación particular, por lo que el apenas hubo sitio para el público.

La banda de los Chukis fue desmantelada en una redada de la Guardia Civil en Vigo en el 2015 tras relacionarlos con 80 altercados en O Val Miñor. Pegaban y atracaban a adolescentes por la noche cerca de las discotecas. Hubo 15 pandilleros investigados.

PITA

Una víctima contó en la vista que le dieron una patada en la cabeza y le golpearon con una barra de hierro. «Iba con mi novia y un amigo, a ellos no los conocía, sentí una patada en la cabeza y se me vino una avalancha de veinte personas encima», relató en el juicio. El joven reconoció a un acusado como el agresor que llevaba una barra de hierro y lo identificó en sala. La víctima vio su cara cuando huía en coche y el agresor golpeó el cristal de la ventanilla con la barra. Un vídeo muestra el artefacto metálico.

El segundo lesionado asegura que «me emboscaron, sentí un puñetazo en la espalda, patadas en la cabeza». Perdió un diente y tiene secuelas en la encía.

Los cuatro implicados, dos de ellos en prisión, lo negaron todo. Uno de ellos intervino por videoconferencia desde la cárcel de Monterroso. Uno no reconoce haber estado en el escenario de la paliza, otro no se acuerda, otro niega haber participado en la reyerta y se limitó a ver y separar a los contendientes, y el cuarto dice que esa noche estaba trabajando en una taberna en Vigo.

El principal acusado afronta un año de cárcel y los otros tres una multa de 450 euros cada uno. El fiscal pide que indemnicen con 2.325 euros a sus víctimas.