Multan con 1,4 millones de euros a un bazar chino de Mos por defraudar a Hacienda

E.V.Pita VIGO / LA VOZ

MOS

ANDRÉS CARRASCO

La empresa no incluyó la totalidad de sus ventas en el 2016 para ahorrarse dinero del IVA

19 dic 2020 . Actualizado a las 23:57 h.

La sección cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha condenado a un bazar de Mos dedicado al comercio al por mayor de productos chinos a pagar una multa de 1,4 millones de euros por cometer un delito contra la hacienda pública. Además, le impuso el pago de una indemnización a Hacienda de 713.941 euros. El tribunal también condenó a la mercantil a la pérdida de la posibilidad de obtener subvenciones o ayudas públicas y del derecho a gozar beneficios o incentivos fiscales o de la Seguridad Social durante un período de tres años.

Según la sentencia, la empresa mayorista llevaba una doble contabilidad de la venta de sus productos de forma que el número de tiques no se correspondían a la facturación real.

 Las magistradas ven probado que la empresa presentó autoliquidaciones por IVA correspondientes al ejercicio 2016 en las que, con la intención de defraudar a Hacienda, no fueron incluidas la totalidad de las ventas realizadas. La diferencia entre los ingresos declarados y los reales ascendió, según consta en la resolución, a más de 3,2 millones euros, lo que supuso «la consciente omisión de ingreso en el Tesoro Público de 713.941 euros».

La empresa sancionada, que entró en concurso en el 2019, es un gran almacén situado en una nave de Mos, en Peinador-Os Valos. Fue absuelto su administrador desde finales del 2016, un empresario chino de 31 años,que afrontaba tres años de cárcel. El tribunal le absuelve porque, aunque adquirió el 72 % del capital, no ve acreditado que él tuviese algo que ver con la trama, ya que llegó justo después de los hechos y no está probado que realmente ejerciese labores de administrador.

Los peritos que examinaron los ordenadores de la empresa encontraron un maletón abierto por el acusado que contenía libretas con anotaciones a mano de pagos y cobros de clientes. Escanearon su contenido y descubrieron ventas ocultas al fisco. También localizaron dos ficheros: uno de tiques con ventas reales y otro de facturas, pero que tenían una cantidad menor. Eso llevó a los inspectores a sospechar que la empresa tenía una contabilidad A y otra B, y que todas las ventas están reflejadas pero faltan facturas. Llegaron a encontrar dos millones de euros en ventas sin acreditar.