Sostiene que las obras se están realizando aunque no las perciban los usuarios
11 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El Ministerio de Fomento mantiene para septiembre de este año la conclusión de las obras de mejora de la seguridad vial en la autovía de la A-55. En contra de lo que piensa el gobierno de Mos, los trabajos no están parados. Aunque no se vean, se sigue actuando en la ejecución del proyecto, según explicó ayer una portavoz del Ministerio.
A la alcaldesa de Nidia, este anuncio no le consuela. Ayer compareció públicamente en la Casa Consistorial acompañada por portavoces de la corporación y de representantes de todas las asociaciones del municipio para trasladar el mensaje de que han perdido la paciencia.
El Concello ha organizado una manifestación el viernes a las ocho de la tarde para demandar la continuación de las obras. A la regidora popular no le importa enfrentarse a su propio partido en defensa de los intereses del ayuntamiento. «Por encima de los intereses del PP están los del municipio. En este momento, Mos tiene un problema y mi bandera es la del Concello, no la del partido», dijo ayer. Nidia Arévalo reconoció que hasta ahora la relación con la dirección general de Carreteras siempre fue buena. «El Concello fue resolviendo cuestiones que llevaban tiempo paralizadas. El trato siempre fue exquisito», reconoció. Pero desde hace meses no hace más que recibir largas cada vez que se interesa por el avance de estas obras, que no se observa porque no hay ninguna maquinaria trabajando en la zona.
La situación actual perjudica a los usuarios de la autovía porque deben transitar a diario por un trazado delimitado con la señalización de obras y una velocidad máxima para 60 kilómetros por hora. Pero también supone un problema para los residentes de la zona porque los accesos a barrios y parroquias se encuentran en muy malas condiciones.
«Si para los que transitan es un problema tener la autovía con pintura amarilla y señales de 60, imagínense lo que es para los vecinos de Mos, que tenemos que soportar que nuestras entradas y salidas estén en obras, sin señalización». Una de las zonas más afectadas es la de San Eleuterio, donde viven más de 2.000 personas, y que tienen que pasar por un acceso sin luz.
«Necesitamos una fecha ya»
La alcaldesa esperaba una respuesta rápida por parte de la administración. Ayer dijo que antes de movilizar a los vecinos mantuvo diversas reuniones en las que le dieron plazos que no se fueron cumpliendo. El director general de Carreteras le prometió en octubre que se reanudarían antes de las Navidades. El plazo se alargó posteriormente hasta después de Semana Santa, pero no hubo ningún avance. La última comunicación que el gobierno de Mos ha recibido por correo electrónico de la Subdelegación del Gobierno fija en mayo el reinicio de los trabajos. «No nos vale, no podemos esperar más», expresó la regidora. «Necesitamos una fecha ya, que esa carretera tan peligrosa se convierta en más segura. Todos sabemos que estas obras reducirían los siniestros y aumentarían la seguridad en todo el Área Metropolitana», afirmó. El Concello de Mos no descarta seguir organizando movilizaciones vecinales para demandar la reanudación de los trabajos en la autovía. Creen que los accidentes han aumentado desde que las obras están paradas.