De piso de alquiler a plantación doméstica de marihuana en Moaña

MOAÑA

Guardia Civil

El inquilino transformó las estancias del apartamento con un completo circuito de ventilación, lámparas de calor y aparatos de riego para asegurar la producción

05 ene 2020 . Actualizado a las 10:09 h.

Alquilar una vivienda siempre entraña riesgos. Incluso entre familiares y no siempre porque no se cumplan con los pagos periódicos establecidos o no se mantenga la propiedad en condiciones. El piso de una vecina de Moaña ha sufrido una auténtica transformación tras alquilárselo a una sobrina. En el apartamento vivía la joven con su novio pero, tras la ruptura de la pareja, ella se fue y él pudo campar a sus anchas. Fue entonces, apunta la investigación, cuando se descubrió la customización del piso, que pasó de ser una propiedad residencial con los espacios y servicios habituales a una sucesión de estancias adaptadas al cultivo doméstico o bajo techo de marihuana. Esta modalidad, cuyo anglicismo es Indoor, parece estar en auge ya que el de número plantaciones desmanteladas se ha incrementado notablemente a tenor de las actuaciones confirmadas por la Guardia Civil en los últimos meses. Resulta paradójico la ingente cantidad de entradas que hay en las redes sobre esta práctica ilegal pero que, sin duda, ayuda a hacer frente al pago de cualquier alquiler. «Tiempo de crecimiento en interior, consejos básicos», «La rentabilidad de la marihuana indoor» o «las maravillas del micro cultivo», son los primeros de los cuatro millones de resultados que aparecen en cuanto se teclea la frase Cultivo Indoor en Google. Son páginas realmente didácticas y pedagógicas que explican todos los trucos y pormenores para rentabilizar al máximo posible el uso de armarios o habitaciones vacías con el único gasto a mayores del de la electricidad. Incluso se suma el atractivo de que hacerlo bajo techo y no en galpones y terrazas, evita que la cosecha esté a expensas de una climatología cada vez más cambiante. Es lo que hizo el ex novio de la joven, que había abandonado el domicilio tres meses antes de que la propietaria, acompañada por la Guardia Civil accediera hace unos días a su piso. «Se pudo comprobar cómo diversas estancias del inmueble estaban perfectamente acondicionadas para el cultivo, en sus diferentes fases de crecimiento». «Se incautaron más de 25 plantas de diversos tamaños, dos básculas de precisión, diversos abonos y fertilizantes y diversas publicaciones relativas al cultivo de marihuana», informa la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra. En el piso había además «todo un circuito de ventilación con lámparas de calor, ventiladores, aparatos para el riego, una veintena de botes de cristal con restos de marihuana y dos cajas de setas». El inquilino, un vecino de Moaña de 41 años de edad y con antecedentes policialesl fue detenido por un delito contra la salud pública en su modalidad de cultivo y elaboración de drogas. Ha quedado en libertad con cargos