La familia rescatada por la Guardia Civil en Gondomar: «Se nos echó la noche encima»

Operativo humanitario en Gondomar con final feliz. La Guardia Civil consiguió localizar y rescatar el martes a una familia de Vigo que se desorientó en O Galiñeiro. «Subimos por una ladera empinada y, como era muy en cuesta y llevábamos dos niños, optamos por bajar por otra pista», explica el padre de familia, Andés Carrera. La tupida vegetación dificultaba seguir el rastro de la pista y «la noche se nos echó encima». Como llevaban a los dos niños que ya se cansaban, para evitar que se complicara la situación optaron por llamar a la Policía Local. «Le mandamos la geolocalización y fueron los primeros en llegar, pero no era fácil acceder hasta nosotros, así que pidieron refuerzos», recuerda Andrés.

Su mayor preocupación eran los niños «aunque hacía buena noche y estrellada, así que se veía bastante». Siguieron los consejos de los agentes y permanecieron tranquilamente en el lugar desde el que mandaron la señal. Pasó hora y media en total hasta que vieron los destellos de las linternas de los guardias de Gondomar que consiguieron llegar hasta ese punto.

La decisión de esperar fue la más sabia porque el terreno era especialmente difícil. De hecho, uno de los guardias resbaló en uno de los pedruscos cuando iba en busca de la familia y sufrió una lesión en una pierna. Localizaron a los senderistas sobre las 23.45 horas en una zona rodeada de tojos. En el operativo participaba la Policía Local y el GES de O Val Miñor, que estaban en la zona base. Los guardias cargaron a los niños y con sus padres emprendieron la ruta de bajada. «Tras el rescate se bajó por la zona más viable, pero aun así las condiciones del terreno y la pendiente hacía que se desprendieran las piedras», indicaron fuentes de la Guardia Civil. «Su ayuda fue fundamental para volver a casa, no lo olvidaremos», dice la agradecida familia.

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