Los ayuntamientos y las oenegés reparten alimentos para 250 familias de toda la comarca
28 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Un total de 680 vecinos de O Val Miñor dependen para comer, a día de hoy, de la ayuda de su administración municipal y de las oenegés Ayuda al Mundo Necesitado o Cruz Roja. El número de familias auxiliadas en los últimos meses se mantiene más o menos en las mismas cifras, salvo en Gondomar, donde despuntan todas las estadísticas. A nivel comarcal, se trata del 1,5% de la población la que recibe apoyo directo, pero en el caso de la villa gondomareña el porcentaje se dispara hasta el 2,56 %.
«En Gondomar la crisis de la construcción se notó más y en los municipios con costa hay otras salidas en el sector servicios por ejemplo, pero efectivamente, en la villa la tendencia sigue al alza», confirma Rocío Cambra, concejala de Servicios Sociales. El Concello destina entre 1.500 y 1.700 euros a la compra y reparto mensual de alimentos a 120 familias, a los que, además, apoya puntualmente en el pago de las facturas de luz, alquiler de vivienda o medicamentos en la farmacia, que resultan inalcanzables para sus economías. «No hay un perfil concreto de usuarios de nuestro servicio, aunque los que más demandan ayuda son parejas de entre 30 y 40 años con hijos que perdieron los dos el empleo o jubilados con pensiones mínimas para mantener a la familia», dice la edil.
Otras 90 familias de Baiona y 40 de Nigrán reciben apoyos similares. Algunos se benefician del comedor social que funciona en Panxón, pero solo mientras dure el taller de empleo, ya que son sus alumnos los que cocinan. Los comedores escolares alivian las cargas familiares, pero «ni así conseguimos asegurar una alimentación completa para todo el mes y vecinos demandantes», apuntan. La campaña de Navidad queda muy atrás.