El obispado desautoriza al cura de Crecente y abre el cementerio

c. ponce CRECENTE / LA VOZ

CRECENTE

Carlos Ponce

La diócesis Tui-Vigo considera que es "la medida más prudente pastoralmente y sobre todo en estas fechas"

02 nov 2017 . Actualizado a las 22:13 h.

El obispado por fin ha roto su silencio respecto al conflicto del cierre del cementerio de la parroquia de Albeos, en Crecente. La diócesis Tui-Vigo no dudó ayer en desautorizar al párroco, Luis Manuel González y le conminó a mantener abierto contra su voluntad el camposanto «por considerar esta medida la más prudente pastoralmente y sobre todo en estas fechas», asegura en un escueto comunicado el Obispado.

El episcopado reconoce que la decisión del sacerdote de cerrar el cementerio de Albeos, que califica como pedagógica, se debe a «deficiencias en su mantenimiento», en referencia a los vecinos morosos de la parroquia que no pagan las cuotas anuales para mantener las tumbas, que ascienden a tres euros por nicho y uno por cenicero.

Son muchos los feligreses que no pagan sus cuotas. Algunos porque directamente no quieren abonar una tasa, y otros porque viven fuera de Crecente y no saben que tienen que pagar o se olvidan.

Pero el obispado decidió zanjar la polémica y reabrir el camposanto en la época de más afluencia del año. En días previos a Difuntos, muchos vecinos no pudieron adecentar las tumbas de sus seres queridos al encontrarse con el cementerio cerrado. «Isto é unha vergonza», era la frase más repetida, especialmente entre los que llegaban de otros municipios y no pudieron entrar a ver a sus seres queridos por la polémica decisión del sacerdote.

La Voz no pudo recoger la versión del párroco, que declinó hacer declaraciones y explicar su postura. Sin embargo, manifestó por otras vías que cuenta con el apoyo de la mayoría de los feligreses y que es consciente de que el cierre del camposanto llega en la época de más afluencia del año, aunque considera que al cementerio se puede entrar en cualquier otra fecha.

La elección del momento fue lo más criticado por los vecinos. «Estas no son formas, lo ha hecho a traición en la época en la que más gente viene al cementerio», lamenta María Rodríguez, una de las vecinas afectadas.