Detenido en Cangas por robar en más de cuarenta furgonetas de albañiles y fontaneros de O Val Miñor y O Baixo Miño

CANGAS

Guardia Civil

El arrestado es un vecino de Madrid que también circulaba con un vehículo sustraído en la capital de España y que se hizo con un botín de unos 100.000 euros

17 abr 2022 . Actualizado a las 13:34 h.

La Guardia Civil ha arrestado en Cangas al presunto autor de los más de cuarenta robos que empresarios y autónomos de los sectores de la albañilería, la construcción y la fontanería denunciaron en furgonetas de su propiedad durante los últimos meses en el sur de la provincia. El arrestado, de 31 años y vecino de Madrid, utilizaba para desplazarse un vehículo que había sido robado, con violencia e intimidación, el 13 de marzo en Madrid. Se trata de un varón con múltiples antecedentes policiales, principalmente por delitos contra el patrimonio.

La operación arrancó en el Puesto Principal de Baiona-Nigrán en el mes de enero a raíz de la proliferación de denuncias sobre robos con fuerza en furgonetas. En todos los casos denunciados, el delito se consumaba al forzar las cerraduras y llevarse la maquinaria que guardaban en su interior. El objetivo principal del ladrón eran las herramientas eléctricas, ya que son las que más salida tienen en el mercado de segunda mano y las que más fácilmente salen a través de Internet. Los investigadores descubrieron que los robos se producían siempre en el entorno del municipio en el que el detenido pernoctaba la noche anterior. La Guardia Civil lo vincula con los robos denunciados en O Val Miñor, O Baixo Miño, Ponteareas, Marín y Vigo.

Tras su arresto en Cangas, se le intervino en el vehículo una gran cantidad de materiales procedentes de los últimos robos perpetrados así como las herramientas que utilizaba para forzar las furgonetas, varios teléfonos móviles y cuatro ordenadores.

El operativo contó con el apoyo de otras unidades de la Comandancia de Pontevedra, como el Equipo de Patrimonio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial, que localizó en Madrid a la persona que se encargaba de vender los objetos robados a través de Internet y a la que se le investiga por un delito de receptación. El botín asciende a 100.000 euros, pero la Guardia Civil ha conseguido recuperar y devolver a sus dueños parte de las herramientas robadas.