Los «cicloagentes» patrullan Cangas

Monica Torres
mónica torres CANGAS / LA VOZ

CANGAS

Oscar Vázquez

Una patrulla de la Policía Local vigila a diario el casco viejo, sin contaminación acústica ni ambiental

21 abr 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuatro agentes de la Policía Local de Cangas se enfundan cada mañana las zapatillas para ir a trabajar. Son los miembros de la patrulla ciclista que han comenzado a pedalear esta Semana Santa en el municipio para sorpresa de muchos vecinos y turistas.

Estaba previsto que emplearan bicicletas eléctricas, pero su alto coste no pareció rentable en relación al servicio ya que su objetivo es la accesibilidad. «Con las bicicletas tenemos mucho más vigilado el casco viejo», explica el agente Xacobe Melón, que está al frente del grupo. Funcionario con más de doce años en el cuerpo y 32 sobre ruedas, destaca la relevancia del servicio de proximidad y visibilidad. «Es muy positivo, la presencia policial de por sí ya genera seguridad y da tranquilidad», indica el agente, que descubrió su inclinación por la bici a corta edad. «Llevo pedaleando toda mi vida, desde que mis padres me regalaron la primera con cinco años y ahora sigo disfrutando también de mi hobby compartiéndolo con mis hijas», explica mientras atiende a ciudadanos, gratamente sorprendidos por la iniciativa. «Estos días hemos atendido también a mucho turista que nos pide indicaciones sobre algunos lugares de interés», apunta.

No es una unidad específica, sino una patrulla que complementa a las motorizadas. «Aquí lo que prima no es la velocidad», indica, si bien los agentes policiales aseguran una presencia sobre el terreno cinco veces mayor que si lo hacen a pie. Según los principales estudios de movilidad, la cobertura media del terreno a pie es de unos seis kilómetros al día, aunque se puede incrementar hasta los 30 si se hace en bici. «Yendo en moto o coche no entraríamos mucho en el casco viejo si no fuera por algún requerimiento, para evitar ruidos innecesarios de motores y contaminación. Así podemos recorrerlo de forma asidua, generando una mayor seguridad», destaca Melón.

Patrulla con Marcos Carnero, de momento auxiliar y que oposita a policía local y a guardia civil. Su preparación le obliga a estar en plena forma. «Es tan importante la parte teórica como la física y, de esta última, las diez dominadas que hay que hacer», indica refiriéndose a las pruebas de flexiones de brazos en suspensión pura agarrados a una barra. Tanto él como los otros dos policías que completan la patrulla, son auxiliares, así que tampoco tienen problema por que haya que sudar la camiseta. De momento solo hay un servicio. Tampoco hay agentes suficientes debido al importante número de jubilaciones que ha afrontado este año la plantilla, pero la idea es que pronto pueda crecer.

Los desplazamientos en bicicleta son incomparablemente más rápidos y permiten ganar en eficacia de intervención en situaciones de congestión de tráfico o personas, como las que municipios turísticos como Cangas afrontan en la época estival.

«A ver cuándo os ponen carriles bici», les dicen a su paso

La novedad hace que, en menos de un kilómetro, la patrulla ciclista escuche numerosos comentarios. «¿A ver cuándo os ponen carriles bici?», bromea una vecina a su paso. Una vez superado el factor sorpresa, la falta de impacto ambiental y acústico evidencian su encaje en la política de un Cangas Amable que lidera el tripartito, encaminada a la recuperación de espacios para las personas. Alberto Agulla Bará, jefe de la Policía Local, destaca el potencial de humanizar el centro y potenciar la movilidad sostenible. Sobre el paseo Pepe Poeta descansan ya los materiales de la siguiente actuación. «Ahora se va a mejorar el paseo hasta la playa de Rodeira, retirando el adoquinado para facilitar la movilidad», dice.