Luis Piedrahita hace humor con las amígdalas

La Voz

CANGAS

Luis Piedrahita
Luis Piedrahita

El cómico gallego presentará su nuevo espectáculo en el auditorio municipal de Cangas

10 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El auditorio municipal de Cangas presenta, a las 20.00 horas, al humorista Luis Piedrahita, que desarrollará el espectáculo Las amígdalas de mis amígdalas son mis amígdolas. Las entradas cuestan 16 euros.

«No quiero ocultar que de este show se ha dicho que es una de las obras más ingeniosas y poéticas del siglo XXI. Lo que sí quiero ocultar es que he sido yo el que lo ha dicho. Las amígdalas de mis amígdalas son mis amígdalas es el mejor show de humor que he hecho hasta ahora. Me gusta tanto que no me pierdo ninguna representación. Voy a todas. Todos mis espectáculos están diseñados para que haya hueco a la improvisación. Cada día viene gente distinta y yo siempre intento hacerle un traje a medida al público de esa noche», afirma el cómico gallego.

Luis Piedrahita señala que comenzó su carrera como cómico improvisando. «Gané una especie de certamen al que me presenté sin mucha fe. Como ves fue todo muy fortuito. Luego vino la radio, los programas de magia, el cine, los viajes al extranjero, los libros, El hormiguero… Son ya veinte años improvisando para los que no he dejado de prepararme ni un solo segundo», explica.

Su carrera en el ámbito del humor también se ha extendido hacia la publicación de libro. «El humor siempre es necesario aunque no lo parezca. Es necesario porque es lo único que hace la vida llevadera. En realidad no soluciona los problemas. No cura las heridas, ni hace que vuelva la persona amada. Seguirá doliéndonos la espalda, nuestros hijos seguirán suspendiendo alguna asignatura y los políticos seguirán robando, unas veces con la mano izquierda y otras veces con la mano derecha... Todo eso seguirá igual. Pero el humor nos ayudará a que todo eso sea soportable», señala, para explicar su éxito.

Luis Piedrahita tiene su propia visión de la galleguidad, no exenta de sentido del humor: «Dicen que el gallego es trabajador y creo que eso es una de mis mayores virtudes. Es una virtud pesada de acarrear. Preferiría ser brillante, talentoso, guapísimo… o al menos algo que no suponga tanto esfuerzo. Esto de ser tan trabajador lleva muchísimo trabajo».