Pescan a seis percebeiros furtivos en una redada contra una banda de marisqueo ilegal en O Val Miñor

e. v. pita VIGO / LA VOZ

BAIONA

GUARDIA CIVIL DE BAIONA

La Guardia Civil de Baiona arrestó a los implicados tras seis meses de seguimientos y decomisarles media tonelada de percebes en la costa de Nigrán, Baiona, Oia y A Guarda.

03 jul 2021 . Actualizado a las 21:45 h.

La Guardia Civil de Baiona y Nigrán arrestó a seis supuestos percebeiros furtivos e investiga a otras cuatro personas más como miembros de una banda de marisqueo ilegal que actúa desde hace años en la costa de O Val Miñor y O Baixo Miño, en el tramo que va desde Nigrán y Baiona hasta Oia y A Guarda. En total, la red contaba con diez cómplices. Los agentes capturaron a los dos cabecillas en Baiona después de que volviesen en coche y moto de faenar en la costa de Oia. 

A lo largo de seis meses de seguimientos, los agentes decomisaron media tonelada de percebes. Además, los implicados adeudan medio millón de euros en multas a la Xunta porque no las pagaron. Les atribuyen un delito de pertenencia a organización criminal y otro relativo a la protección de la flora y la fauna.

GUARDIA CIVIL DE BAIONA Y NIGRÁN

Esta redada forma parte de la operación Rasqueta II. La Guardia Civil contó con la colaboración de las cofradías de pescadores de Baiona y A Guarda, que dieron apoyo con los servicios de sus guardapescas. A primeros de año, detectaron la proliferación de marisqueo furtivo del percebe en todo el litoral costero del Val Miñor y O Baixo Miño, lo que generó perjuicios económicos a las cofradías y riesgos para la salud pública porque el marisco ilegal se comercializaba sin ningún filtro.

GUARDIA CIVIL DE BAIONA Y NIGRÁN

La Guardia Civil hizo un «big data»

Para localizar a los miembros de la banda se hizo un exhaustivo estudio de big data. Los agentes pusieron sobre la mesa las actas de incautación de los últimos años e identificaron a los sospechosos de la red ilegal y averiguaron qué papel jugaba cada uno: unos se dedicaban a la extracción, otros vigilaban y otros transportaban la mercancía. La banda estaba integrada por diez miembros, vecinos de O Val Miñor, Tui y Vigo. Todos tenían como modo de vida el marisqueo furtivo y sumaban diversos antecedentes.

Los cabecillas detenidos en Baiona llevaban dentro del turismo herramientas para extraer el percebe, un capacho, un traje de neopreno mojado, una funda estanca para el móvil y gafas de buceo.