Tendrá nuevas cámaras, un mirador para el público y otro edificio de chabolas
29 ene 2021 . Actualizado a las 19:59 h.Un total de 24 empresas se han presentado al concurso convocado por la Consellería do Mar para el proyecto de reforma y acondicionamiento de la lonja de Baiona, que asciende a 1,5 millones de euros. Se trata de la principal reforma que se realizará en las instalaciones tras veinte años en servicio y con el plan especial del puerto en la mano. Según avanzó la Xunta, la intención ahora es resolver lo antes posible el concurso para poner en marcha los trabajos, que tienen un plazo de ejecución aproximado de nueve meses.
La modernización de la lonja contempla unificar las dos edificaciones existentes en la actualidad para distribuir en el mismo edificio las actividades y las oficinas administrativas, mejorando sustancialmente las condiciones de trabajo, así como el acondicionamiento energético del inmueble. Al disponer de más espacio, en la lonja habrá dos zonas diferenciadas, una de clasificación y otro para las subastas. El plan incluye un proyecto específico para un nuevo edificio en el que se reubicarán los nuevos departamentos de almacenamiento y trabajo. Se levantará a continuación del actual, de manera que estén cercanos pero en espacios diferentes a los de la lonja.
La zona actual de paso entre las dos edificaciones que se unifican, y en las que había solo máquinas expendedoras, se transformará en el punto de conexión de las áreas de clasificación y de subasta y, además, en el acceso principal de los visitantes a la lonja. Se prevé una limpieza integral de toda la fachada, que recibirá un tratamiento hidrófugo para mejorar su aislamiento.
En la planta baja se instalarán nuevas cámaras de congelado, de carnada y de frío así como una zona de bins para depositar el marisco que se extraiga antes de las subastas y un despacho para el biólogo. La primera planta albergará las oficinas administrativas y en este espacio se dispondrán ventanales de suelo a techo que permitirán a los visitantes poder seguir la actividad de la lonja, pero sin interferir. Es el lugar en el que se habilitará además la ventanilla de atención de la lonja, las oficinas de gestión, la de Portos y dos salas de reuniones.
Nave anexa
La zona de almacenaje y trabajo, que es la zona de chabolas, se ubicará en el edificio que se construirá detrás del actual, con una superficie total de 291 metros cuadrados. Esta nave anexa donde los marineros guardarán sus pertenencias sale a concurso por 422.646 euros. Las fachadas mantendrán el aspecto actual y será en el interior donde se desarrolle el grueso de los trabajos que, además del pintado y sustitución de materiales deteriorados, incluirán la creación de ese mirador abierto al público que permitirá a vecinos y turistas conocer el desarrollo de cualquiera de las subastas que se celebren.
El porche frontal se cerrará, manteniendo el primer pórtico de madera en el exterior. El espacio resultante se destinará a almacén y dará paso a la zona de aseos y vestuarios de la propia lonja. Se trata de una actuación muy importante para la industria principal de la villa, que trabaja desde hace años en unas instalaciones obsoletas para atender las necesidades actuales.