El plan de emergencias de la presa de Baiona prevé sirenas y simulacros con los vecinos

Baiona ha presentado el plan de emergencia de la presa de Baíña con el objetivo de que la población de las zonas en las que pueda haber una posible inundación conozca el riesgo real, sea consciente de las instrucciones básicas para actuar de forma coordinada en caso de que se produzca y también que colabore con los simulacros que se lleven a cabo. En el caso de Baiona se ha decidido la colocación de dos sirenas, que estarán ubicadas en la potabilizadora y en otra zona unos metros más abajo, avanzó ayer el regidor local Ángel Rodal. Se instalarán en los próximos meses y alertarían a la población en caso de una incidencia o un aumento del nivel de agua importante y repentino en el cauce que obligase al desalojo inminente de la población.

El regidor destacó que se trata única y exclusivamente de un protocolo de seguridad que hay que implementar por Ley pero que solo debe tranquilizar aún más a la población. «Nuestro embalse es pequeño y de los más seguros, además nunca ha habido un incidente así en ningún sitio pero el protocolo es de obligado cumplimiento y solo garantiza más seguridad aún», quiso dejar claro el regidor. El radio de afectación ante un posible escenario de emergencia comprendería la parroquia de Baíña y de su cuenca principalmente.

El plan prevé dos puntos de encuentro para la población en caso de que saltaran las alarmas y que, previsiblemente se localizarán en el entorno de la iglesia de Baíña y en la zona entre el puerto deportivo y la playa de Ladeira. El volumen de las sirenas indicaría el nivel de la emergencia, que será de tres grados y, en los próximos meses se hará una prueba sobre el terreno para que los vecinos conozcan el sonido. «El conocimiento del riesgo y del territorio es la base para poner en marcha mecanismos de prevención, información y planificación que permitan coordinar a los servicios de emergencia y garantizar la autoprotección ciudadana como medio más eficaz para mitigar las consecuencias», insistió el alcalde para evitar alarmismos innecesarios pero para asegurar el conocimiento vecinal del protocolo. De hecho, también se entregará a la población de la zona material impreso en el que se recogen los consejos a seguir, como alejarse del cauce de ríos y arroyos, acudir a lugares elevados o estar atento a los avisos de las autoridades.

La infraestructura es de la Xunta y ha sido el Subdirector Xeral de Xestión do Dominio Público de Augas de Galicia, Roberto Arias Sánchez, acompañado por otros técnicos del servicio, los que presentaron el calendario para la implementación de este protocolo de emergencia. La presa está ahora llena por lo que hay garantizados siete meses de agua.

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