Confirman la presencia humana en las Rías Baixas hace 118.000 años

Monica Torres
m. torres ARBO / LA VOZ

ARBO

Méndez Quintas

La investigación es tan relevante que permite demilitar el Paleolítico Antiguo en el suroeste europeo

28 sep 2019 . Actualizado a las 05:05 h.

«Los primeros pobladores de Galicia habitaban en la cuenca fronteriza del Miño, donde también se sitúa la mayor densidad de población hace medio millón de años, durante el Paleolítico Antiguo, la franja que va desde A Guarda hasta Ourense». El arqueólogo miñorano Eduardo Pérez Quintas confirma las nuevas informaciones que han conseguido obtener de la investigación realizada entre los años 2010 y 2012 en el yacimiento de O Cabrón, en Arbo. Ahora disponen de los resultados de los análisis de radiación en sedimentos que se han practicado en un laboratorio de Australia, que se conocen como luminiscencia sobre granos de feldespato y resonancia paramagnética electrónica, que son los que permiten concretar dataciones con exactitud.

«Entre las novedades más importantes está la datación, que era lo que se discutía, aunque sabíamos por las herramientas encontradas que era una cronología similar a la de Porto Maior, en As Neves, en torno a los 200.000 o 300.000 años, pero lo que hemos visto es que es más joven. Como máximo tendría unos 190.000 años. Tenemos una fecha concreta de 118.000 años, pero creemos que es un poco más antiguo por una serie de cuestiones geológicas».

«Este resultado permite referenciar y poner el límite final, a escala europea del Achelense», que es la cultura más importante del Paleolítico Antiguo, sobre el que aún no había un consenso en cuanto a la datación, aunque se desarrollaría en el período comprendido entre hace unos 500.000 años hasta hace 200.000. «Estos resultados nos dicen que el Achelense acaba en un momento más reciente de lo que pensábamos. Los análisis permiten delimitar este período ya que ahora sabemos que esta tecnología achelense se seguía utilizando en Arbo hace unos 120.000 años, posiblemente por poblaciones de origen africano distintas a las neardentales, por lo que ya podemos definir el límite de esta tecnología a escala europea», explica el arqueólogo y profesor de la Universidade de Vigo.

Otra de las aportaciones clave, apunta, es la confirmación de que «existían dos grupos distintos que convivían en la misma península con la misma tecnología ya que, aunque no sabemos si también en Arbo, en otros puntos de la zona había neardentales».

La investigación da un giro a la perspectiva del Paleolítico en Galicia. «Teníamos la idea de que no había sido importante pero ahora, y tal como estamos publicando en las revistas más prestigiosas, sabemos que es muy importante porque además permite explicar procesos a nivel continental y eso es muy relevante», señala Méndez Quintas.

El de O Cabrón de Arbo es el yacimiento al aire libre de Europa con mayor densidad de herramientas, que están en el Museo de Pontevedra. «Sabemos que quienes las hicieron tenían una gran pericia porque estéticamente son piezas muy bonitas y demuestran que el lugar era empleado en el Paleolítico como de consumo por lo achelenses», destaca al arqueólogo. Se plantea que diversos grupos usaron la zona como punto de encuentro y refugio en el que se cosumían animales cazados en otros lugares pero transportados después hasta este yacimiento.