Dos caballos muertos en accidentes en menos de un mes en la carretera de Oia

alejandro martínez O PORRIÑO / LA VOZ

A GUARDA

ALEJANDRO MARTINEZ MOLINA

La presencia de ganado en la PO-552 y en la AG-57 alarma a los conductores

24 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La presencia de ganado y animales salvajes en las carreteras continúa provocando accidentes de tráfico. Vacas, perros, caballos o jabalíes que invaden la calzada suponen un gran riesgo para los animales pero también para los usuarios de las vías. El goteo de siniestros es constante, sin que las señalizaciones de peligro sirvan para remediarlo. Recientemente una mandada de jabalíes se cruzó a un turismo en la AG-57. Además, en menos de un mes, han muerto dos caballos atropellados por vehículos a la altura del municipio de Oia.

Los choques ocurrieron en el tramo de la costa de la PO-552. En ambos casos, los conductores no pudieron esquivar el golpe ante la irrupción de los équidos en medio del asfalto. Los dos animales fallecieron en el acto.

El primero ocurrió el día 4. Un joven de 26 años resultó herido tras empotrarse contra el cuerpo del animal. Los hechos de madrugada a la altura de la parroquia de Santa María de Oia. El conductor acababa de salir del trabajo e iba de regreso a su casa. Tuvo que trasladarse en ambulancia al punto de atención continuada de A Guarda con heridas de diversa consideración. Su vehículo quedó muy dañado como consecuencia del impacto. Al parecer, el animal estaba domesticado y se había escapado de una finca, según manifestaron algunos testigos.

El último accidente tuvo lugar el lunes de esta semana. En este caso fue una yegua preñada la que invadió la carretera. El suceso tuvo lugar sobre las nueve de la mañana. A esa hora aún estaba amaneciendo, pero como no llovía, no había una mala visibilidad.

Ileso

El conductor resultó ileso, si bien su vehículo sufrió numerosos daños. En esta ocasión se trataba de un caballo salvaje de los que pastan libremente por los montes de A Groba. Es muy habitual que estos animales silvestres invadan las carreteras más arriba, en Torroña, Burgueira o Couso, por ejemplo, pero resulta raro que bajen hasta el nivel del mar. La alcaldesa de Oia, Cristina Correa, confirma que no es nada habitual. Todos los caballos tienen dueño y de ahí la importancia de que estén provistos con un microchip, para poder ser localizados y que asuman las responsabilidades que dicte la ley. Al parecer, en este caso

Pero no es la primera vez que los animales causan accidentes en esta misma carretera.

Hace dos años unos perros que corrían detrás de un tractor provocaron que un ciclista se cayera de su bicicleta y tuviera que ser trasladado en ambulancia. En A Guarda, una conductora cayó por un barranco al evitar un perro abandonado en el mismo vial, mientras que en Baiona un joven se fue contra unas rocas para esquivar a otro perro.

Hace años el Concello de Oia instaló pasos canadienses para evitar que se escape el ganado.