El balneario de Laias acogió ayer la celebración del patrón de la Fundación San Rosendo reuniendo a buena parte de sus 1.500 trabajadores en Galicia en una jornada lúdica en la que se compaginaron actividades de ocio con reuniones para que los empleados de diversas áreas pudiesen compartir sus experiencias del último año. Una cita en la que se analizó la actualidad de la empresa y su evolución en los últimos años con un importante incremento de la especialización en los cuidados a personas mayores, que cada vez ingresan en los centros de la entidad con un grado de dependencia más elevado. La fundación está ampliando su sistema de gestión de calidad a toda la red de centros, que actualmente suman 67, y tiene previsto la entrada en funcionamiento de nuevos centros asistenciales como el de A Cañiza (en Pontevedra) que se pondrá en marcha el próximo mes de septiembre y que se suma al recientemente inaugurado en el municipio ourensano de Muiños.
Pero los protagonistas absolutos de la jornada festiva han sido los 13 empleados que se jubilan este año y que han desarrollado su labor en las provincias de Ourense y Pontevedra. Una cena homenaje, que culminó con la entrega de las medallas de la Fundación San Rosendo, sirvió para premiar su trayectoria profesional en un acto en el que participó también el obispo de Ourense, Leonardo Lemos Montanet, que presidió los oficios religiosos que tuvieron lugar con motivo de la celebración.