El silencio vestido de beige en Vigo

Uxía Lorenzo VIGO / LA VOZ

VIGO

M.Moralejo

Miss Beige realiza en el puerto una de sus «performances singulares»

05 jul 2025 . Actualizado a las 18:36 h.

Unos minutos antes de las 12.00 horas de este sábado, Miss Beige apareció en los jardines próximos a las piscinas del Real Club Naútico de Vigo. Un grupo de personas, todas vestidas de color beige, hacían un círculo en el que también estaba ella. El ambiente era silencioso.

Miss Beige saludaba a todo aquel que llegaba e incluso a aquellos que pasaban por su lado o veían desde la distancia, pero siempre en silencio y con un movimiento de mano y cabeza. Su cara era de indiferencia, tranquilidad, seriedad. Por momentos movía los labios pero sin emitir sonido. Solo se limitó a hacer gestos. 

M.Moralejo

Los asistentes a la performance se mimetizaron a la perfección. A medida que se incorporaba una persona nueva al grupo, la artista le integraba y le llevaba al centro para dar la mano al resto. Algunos incluso hacían una pequeña reverencia a modo de saludo y le enseñaban el martillo que llevaban consigo. El martillo es un elemento representativo en Miss Beige con el que pretende «poner orden». Cuando la ronda de bienvenidas concluía, el silencio volvía a impregnar el ambiente. 

Las miradas iban de un lado a otro. Durante unos minutos, música gallega empezó a sonar a lo lejos. Miss Beige se puso a bailar, con los brazos en alto, y el resto la siguieron. Al ritmo de las gaitas, el círculo de personas comenzó a moverse. 

Pasado un tiempo, la artista madrileña ordenó a todos ponerse en una fila, estando ella a la cabeza. A paso lento, todos comenzaron a caminar con destino al puerto, la función se había terminado. 

Miss Beige, con más de 72.000 seguidores en Instagram, es un alter ego de la actriz y artista madrileña Ana Esmith. A través de sus publicaciones, imágenes y performances, se cuela en la realidad para hacer reflexionar. En sus redes defiende que «lo personal es político» y expresa así sus convicciones, a veces a modo de denuncia. 

El beige es un color «no querido, soso, insulso», de ahí el motivo de su vestimenta. Al final, se trata de un personaje ficticio con el que pretende «cuestionar la tiranía de la belleza femenina».