Comenzó a idear el universo medieval de «Fiefdom» en el 2020, después de invertir en bolsa los ahorros de su primer trabajo
30 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.«Con dieciocho meses toqué mi primer juego». Eso es lo que el padre de Sacha Kaici le recuerda cada vez que tiene ocasión. Este joven vigués, de padres franceses, ha creado su propia compañía de videojuegos, White Tower Games, con tan solo veinticinco años. «Con doce años descubrí un juego llamado Chivalry 1 y vi el potencial que tenía el género medieval», explica. Este género, denominado slasher, lo capturó desde el primer momento. «Creo que mi gusto por lo medieval también viene de que me encanta desde siempre la Arribada de Baiona», confiesa.
Con quince años ya había creado su primer equipo competitivo para jugar entre personas de toda Europa. Tras estudiar un ciclo superior de administración de sistemas y redes, comenzó a trabajar en la empresa de su padre, lo que le permitió ahorrar durante unos años. Con ese dinero fue con el que decidió invertir en bolsa, lo que a la postre le permitió hacer poner en marcha su proyecto personal.
Su gran idea fue crear su propio videojuego, llamado Fiefdom. «Quise crear un juego medieval de lucha en el que también esté presente la magia». A pesar de que inicialmente se lo planteaba como un trabajo complementario a otro que define como normal, decidió arriesgarse y apostar por su proyecto. «Conocía a dos chicos polacos que también querían hacer algo así. Con ellos comencé a dar los primeros pasos», relata.
Ahora mismo, su empresa White Tower Games cuenta con equipo de veinticinco personas, aunque solo once trabajan a tiempo completo en este negocio. «Durante los primero seis meses todo fue experimentar, ver qué funciona o en qué fallábamos y saber hacia dónde queríamos dirigirnos», cuenta Sacha.
Todo comenzó en el año 2020, cuando este joven empezó a escribir toda la historia y el universo en la que se sustenta el videojuego. «Redacté más de doscientas páginas en las que se explica todo el juego y sus niveles», e explica. Fiefdom está pensado como una franquicia, ya que contempla la existencia de dieciocho reinos, lo que facilita que pueda haber más de un juego. «El juego saldrá para todo el público en el año 2026». El objetivo del próximo año es conseguir inversores: «Queremos organizar un crowfunding, pero yo también intentaré que alguna editorial de videojuegos valore la posibilidad de apostar por nuestro proyecto».
A pesar de que cuando comenzó pensaba que sería más fácil recaudar fondos, sí que se visualizaba consiguiendo llevar a cabo su sueño.
Sacha reconoce que su familia se sitúa entre la fascinación y el miedo. «Siempre hay un período en el que parece que puede ir mal, que creo que ahora estamos ahí», apunta. Sin embargo, a pesar de esto asegura que ve el proyecto con optimismo, pues asegura: «Solo necesitamos vender 10.000 copias para recuperar los invertido».
Uno de sus sueños es crear sucursales en diferentes países, desde donde los equipos del proyecto puedan trabajar. Asegura que le gustaría que una estuviera en Vigo, pero si en este primer intento no consigue el éxito, lo tiene claro: «Voy a seguir».