Los operarios calculan que este martes la playa ya debería quedar adecentada
30 jul 2024 . Actualizado a las 17:07 h.Samil amanecía este martes con un panorama muy diferente al de los últimos 14 días. Los montones de basura que recibían a los bañistas durante las últimas semanas empezaban a ser recogidos por el personal de la empresa Zonas Verdes de Vigo, después de que el lunes decidieran dejar en suspenso la huelga que mantenían. Las gaviotas, que esparcían los desechos no recogidos por toda la playa, empezaban a quedarse sin nada picotear, al encontrar el que era su banquete ahora introducido minuciosamente en decenas de bolsas de basura. Y en el paseo, la mugre acumulada frente a los cubos dejaba de ser protagonista, para volver a otorgarle todo su esplendor a las vistas de las Cíes.
Las reuniones celebradas el lunes entre la dirección de la empresa y los representantes de los trabajadores lograron un acuerdo económico que garantiza que se actualizarán los salarios según el IPC. La concesionaria tuvo que dedicar este martes «un porcentaxe alto de xente a limpar a zona de Samil», según cuenta Alfredo Filgueiras, presidente del comité de la empresa. Solo con el trabajo de esta jornada esperaban dejar la costa como la encontraron sus visitantes antes de las acciones sindicales: «Entre o que se fixo no turno de mañá e o de tarde, un 90% ou un 100% vai quedar en perfecto estado», dijo.
Para los visitantes a la emblemática playa, el acuerdo se hizo de rogar. Eran muchos, tanto bañistas como hosteleros, los que reclamaban en los últimos días una solución y, en concreto, la intervención del Concello en el conflicto. Filgueiras también es crítico en este aspecto: «[El Concello] non se debería manter á marxe. Isto é unha xestión de cartos públicos, cunha empresa privada á que se lle permite ter aos seus traballadores en folga e sen cubrir os servizos contratados, deberían ter intervido».
El gobierno local no hizo ninguna valoración sobre el fin de la huelga. En dos ocasiones, en grabaciones enviadas a los medios de comunicación en las últimas dos semanas, el concejal de Parques y Jardines, el socialista Ángel Rivas culpó a los huelguistas de ensuciar la ciudad a propósito y de estar dirigidos por el BNG. El presidente del comité de empresa, de la CIG, lo desmiente: «Se quixeramos facer política, non viriamos ao traballo. Dende o primeiro momento decidimos non intervir en ningún acto político, e non boicoteamos ningún dos que Abel Caballero fixo en Samil, incluso estando a metros de nós».
Con todo, el conflicto no ha terminado. La suspensión de la huelga es de carácter temporal, y responde al acuerdo económico para facilitar las negociaciones sobre el nuevo convenio, que todavía no está firmado. Será el miércoles 8 de agosto cuando la empresa y los trabajadores vuelvan a sentarse con un mediador para solucionar los flecos pendientes, como la incorporación del personal eventual a la plantilla fija o la compensación de festivos. Las previsiones son positivas, según afirma Filgueiras, pues el apartado más problemático de las negociaciones ya está solucionado: «Para as empresas e os traballadores sempre é máis importante o económico, que era no que estabamos máis distantes, e se solucionamos iso, acabaremos chegando a un encontro no resto».