Vecinos de la zona reclaman a la japonesa mejoras y mantenimiento de espacios verdes
22 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Cada mes o mes y medio, un grupo de vecinos que residen en las inmediaciones del Parque García Picher, —el que está al final de la calle Coruña hacia Beiramar—, que se juntan para limpiar una zona de la que quieren se disfrute sin tener en un entorno cuidado. Hay servicio de limpieza municipal (ahora en huelga, pero la iniciativa de este colectivo es anterior) pero lo que les motiva es precisamente el servicio ofrecido: «Las acciones que hacemos pretenden visibilizar la dejadez en cuanto a este parque en concreto, pero en general, todos los parques de Vigo están en una situación parecida, tardan un montón en pasar a cortar la hierba, dejan que esté muy alta, podan a destiempo, si muere un árbol no lo sustituyen...», enumera Christian Brea sobre el que añade que «desde que se abrió en los años 90, pocas mejorías le hicieron», lamenta.
El equipo de personas voluntarias del barrio no es fijo, dependiendo de la fecha que decidan, se apuntan quien quiera y pueda, rondan la decena, pero no por ello desisten de la causa. «No es cuestión de cuántos sino de qué». La limpieza, aclara, la hacemos porque muchas veces está muy sucio. Hemos llamado muchísimas veces al Concello pidiendo más papeleras, al principio eran abiertas por arriba y conseguimos que pusieran las que van tapadas para evitar que las aves sacaran todo para afuera, pero trajeron menos de las que teníamos, redujeron aún más el número de papeleras y son necesarias, incluso vendrían bien algunas para reciclar plásticos y latas», cuenta.
El García Picher es un parque que tiene mucho movimiento de gente, de trabajadores de la zona del puerto y praza de América, y de jóvenes que estudian en las facultades de la Universidad de Vigo en Torrecedeira. «Van mucho a comer al parque, además tienen al lado el supermercado donde estaba ToysRUs!, indica el vecino, que forma parte del colectivo que se llama Defensa do Parque García Picher y como recuerda, tiene su origen en el intento del Concello de Vigo de convertir el parque en un macroparque infantil.
«En su momento recogimos cerca de 2.000 firmas cuando nos enteramos del proyecto para convertir una zona verde en una explanada de caucho, y no sé si se paralizó a causa de eso o no, no tenemos más noticias de que vayan a seguir con esa idea, ojalá no las tengamos porque es una aberración», opina.
Silvia Sánchez, otra residente que forma parte de este grupo, recalca que «lo lógico sería no gastar tanto dinero, en principio estimaban el coste en más de un millón de euros y cambiaron la denominación de parque a plaza para poder hacer lo que les de la gana».
Brea como portavoz del resto señala que lo que quieren son mejoras del parque como parque para recreo ciudadano, con más árboles, más sombra, fuentes, mejor limpieza». El problema, apuntan es que cada vez que el Concello hace algo, «una vez terminado se desentienden, no hay mantenimiento». Lo explica con un ejemplo reciente, la plaza de A Miñoca. «La reformaron por completo y está otra vez abandonada, ya hay media docena de arboles muertos y no los retiran ni los sustituyen». Apuntan las deficiencias a las subcontratas en el departamento de Parques y Jardines: «Es lo que pasa cuando conviertes un servicio público en privado». El colectivo no solo sale a limpiar, llevan a cabo también otras iniciativas destinadas a destacar la importancia de los árboles en las ciudades.
Denuncian que el único recinto vallado para perros está abandonado: «No desinfectan nunca»
En su última salida de limpieza hace un par de domingos, los vecinos retiraron más de una decena de sacos con basura esparcida, cerca de dos kilos de colillas, plástico, botellas, marcos de madera apolillados... un catálogo que demuestra la necesidad de lo que reclaman: «El servicio de limpieza es pésimo», resumen. «Tampoco limpian las hojas que caen, están meses en el mismo sitio», aseguran. Defensa do Parque García Picher también apunta a las peticiones, «unas mesas donde poder sentarse a comer, un tejado que haga sombra en el parque infantil donde cae a plomo sin una esquina en la que resguardarse, que sí la tienen en el de la plaza de la Industria con grandes árboles, que está siempre a tope de niños, y baños públicos para que la gente no orine por todas partes».
En este parque también hay un minúsculo recinto vallado, denominado parque de perros. Los residentes resaltan que «también está abandonado y eso que cada vez hay más en Vigo; antes desinfectaban cada semana y ahora no lo hacen nunca, las verjas están oxidadas, la fuente está rota, siempre encharcado y también allí cortaron árboles», denuncian.
Alerta árboles en Canido
En este sentido, el grupo municipal del BNG denunciaba ayer también que exigirá al Goberno municipal que actúe «diante da vandalización denunciada en varias árbores no paseo da praia de Canido». Los nacionalistas trasladan la demanda de vecinos de San Miguel de Oia que advierten de «accións contra exemplares de plataneiro situados diante dunha nova urbanización e que, temen, procuran a súa desaparición para despexar as vistas».