Las cifras de ejecuciones de desahucio aumentaron un 46 % en tres meses
06 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El drama de los desalojos de los inquilinos que no pueden pagar el alquiler continúa en Vigo tras una tregua favorecida por la protección de la ley a las familias vulnerables. La comisión judicial ha incrementado el ritmo de expulsiones por encima del número de órdenes que envían los jueces, lo que significa que, tras un parón, se están poniendo al día con los asuntos atrasados. Ahora hay más de un desalojo por día.
Las ejecuciones de desahucio (lanzamientos) de inquilinos que no pagan la renta del alquiler aumentaron un 46 % en apenas tres meses. Los agentes del Servicio Común de Notificaciones y Embargos acudieron a cambiar la cerradura de las viviendas y ejecutaron entre enero y marzo un total de 78 mandatos judiciales para expulsar a inquilinos mientras que entre abril y junio hicieron 114, un 46,1 % más.
Por su parte, las órdenes que presentan los jueces en el Servicio Común también siguen en aumento: de 91 presentadas en el primer trimestre se pasaron a 109, un 19,7 % más.
Se ejecutan más lanzamientos que los que se presentan porque la oficina se está poniendo al día. Muchas órdenes estaban paradas a la espera de que la Xunta buscase un hogar y realojase a las familias vulnerables con niños en riesgo de exclusión.
Fuentes del Servicio Común indicaron que, a pesar de la subida de lanzamientos entre abril y junio, «no se trata de una cifra llamativa» respecto a otros años aunque sí se notó un aumento respecto al primer trimestre.
Este año fue especialmente duro porque el 2 de mayo un inquilino, padre de dos hijos, que iba a ser desahuciado se lanzó por la ventana al patio delante de la comisión judicial que le iba a desalojar junto a su familia y resultó herido muy grave. El personal entró en shock y paralizó el lanzamiento. A día de hoy, desconocen la suerte que corrió el hombre, que resultó hospitalizado.
Cuando la comisión judicial llega a una casa, la vivienda suele estar vacía porque el inquilino se fue antes, tras resolver varios incidentes, pero en los tres últimos meses el juzgado desalojó a varios residentes que no se querían marchar de la vivienda ni entregar las llaves al casero.
En un par de ocasiones, los funcionarios judiciales acudieron con la Policía Local de Vigo para expulsar a los ocupantes en precario. «Generalmente, si hay una familia con niños, se soluciona antes de llegar a esos extremos», afirma el letrado judicial Fernando Varela. Dice que no le constan casos de hipotecados en viviendas habitadas.