La dirección comunica a sus 200 trabajadores, a los que adeuda una nómina, que no ve viabilidad a causa de los costes de la electricidad y las materias primas
08 mar 2023 . Actualizado a las 19:16 h.El grupo vigués Ganomagoga, especializado en calderería y fabricación de grandes estructuras metálicas, parece abocado al concurso de acreedores tras medio siglo de actividad. La empresa con plantas en Vigo, Ponteareas, Mos y O Porriño y que en los últimos ejercicios ha dedicado buena de su producción al sector eólico, ha avanzado a su plantilla, compuesta por más de 200 trabajadores, que atraviesan serias dificultades y no ven viable reconducir la situación.
El grupo engloba a las firmas Talleres Ganomagoga, Aplimega, Ganomagoga Logistics y Cedval. La actividad de la empresa calderera se ha visto lastrada en los últimos meses por el aumento de los costes de electricidad y las materias primas, según explicó la dirección a la plantilla. La situación se agravó en diciembre, cuando el grupo dejó a deber parte de la nómina a sus empleados (el 20 %), que luego cumbrió en enero. Sin embargo, ese mismo mes se repitió la situación, motivo por el que los trabajadores comenzaron una serie de movilizaciones para «denunciar os incumprimentos no pago de salarios e reclamar o abono inmediato das débedas pendentes». La empresa ha declinado hacer declaraciones a este periódico sobre la situación que atraviesa.
Ante la deriva de Ganomagoga, la plantilla retuvo unas piezas para torres eólicas que estaban fabricando para la compañía Gri Towers. Lo hicieron como medida de presión para percibir la deuda pendiente. Ayer desbloquearon esta situación, cuando la dirección pagó el 20 % de la nómina adeudada de enero. Estos días despacharán otros lotes de cimientos y torres de acero y metal para la empresa Gri Towers a cambio de recibir parte del salario de febrero. Se trata de uno de los principales clientes del grupo gallego. Pertenece a la corporación Acek, propietaria a su vez de Gestamp, auxiliar de la automoción que cotiza en la bolsa española. Desde Gri Towers especifican que su relación comercial es exclusivamente con Ganomagoga y no con las trabajadores. También apuntan que las grandes piezas de los molinos eólicos que montan hasta en ocho países suministradas por el metal gallego están llegando con «cierta» regularidad.
La sombra de la suspensión de pagos se cierne sobre Ganomagoga junto cuando el sector eólico, en el que habían ido ganando cada vez más presencia, está en pleno auge. El grupo vigués también ha desarrollado en estos últimos años trabajos para la industria de la biomasa, el naval y la automoción.
Facturación
Según las últimas cuentas auditadas de la empresa, correspondientes al ejercicio 2021, el grupo facturó 13,6 millones de euros (en el 2020 fueron 15,17). La situación se enquistó «precipitadamente» porque, en un primer momento, los trabajadores y la empresa se reunirían para convocar un ERTE. Sin embargo, en una asamblea celebrada ayer, el Grupo Ganomagoga insistió en lo complejo de la situación, que podría desembocar en un ERE concursal. Según informaron a su plantilla, de momento, ven difícil otra salida y la continuidad.
Historia
Cándido González fundó el grupo Ganomagoga en 1975, junto a otros cuatro socios, todos ellos derivados de la calderería. Procedían de otra de las grandes empresas del sector de construcción de equipos pesados del área de Vigo. A partir del 1979, la firma comenzó a diversificar su actividad y comenzó a trabajar en la industria del automóvil, con la que sigue vinculada hasta hoy en día. Ha tenido clientes en todos los continentes y no dejó de crecer, comprando incluso en el año 2019 la calderera vigues Wärtsila Ibérica (antes Cedervall), con la que fabricó piezas para los mayores trasatlánticos del mundo como el Oasis of the Seas y también para buques de Defensa de los Estados Unidos.