El SOS de la asociación de vecinos: «Se isto pecha, acabouse Lavadores»

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO

Oscar Vázquez

La directiva de la entidad vecinal busca nuevos socios y voluntarios

13 feb 2023 . Actualizado a las 23:36 h.

La asociación de vecinos de Lavadores vive al día. Su economía es tan justa, que no serían capaces de afrontar cualquier imprevisto. Dentro del edificio hay carteles que aconsejan no subir del todo las persianas. Si se estropearan, no habría dinero para repararlas. «Vivimos en el alambre. Si algo se rompe, no hay dinero para arreglarlo», destaca el presidente de la entidad, Antonio Rodríguez Martínez.

Por este motivo, desde la junta directiva de la asociación vecinal han emprendido una campaña de concienciación. Quieren sumar más socios, dar cobijo a nuevas actividades y también que entre savia nueva en los órganos directivos. Para ello, han colocado carteles, donados por una directiva, alertando de la delicada situación.

En definitiva, desean que la asociación recupere la ilusión de los vecinos de hace décadas, cuando pusieron dinero de su bolsillo para adquirir la sede en 1985 y dedicaron tiempo y esfuerzo personal para poner a punto el centro vecinal. «Cuando se compró, la mayor parte de las reparaciones las hicieron los propios vecinos. Había una bolsa de horas. Pusimos cada uno 5.000 pesetas para la compra. Queremos, en la medida de lo posible recuperar ese espíritu de colaboración», afirma Manuel Costas, también directivo de la entidad.

La asociación no bajaba de los mil asociados. Sin embargo, el anterior presidente, Eduardo Fernández Pérez, la dejó en 2021 tras once años de gestión con 250 socios, una hipoteca de 89.000 euros y un saldo negativo de 88 céntimos en la cuenta bancaria. La sede vecinal llegó a estar hipotecada en 128.000 euros. Desconocían esta deuda porque se hizo «de espaldas a los socios», afirma el actual presidente vecinal. Se encontraron con personal contratado desde ese mismo mes.

También había un «agujero» de 13.000 euros por la gestión del solar del párking. Esta herencia fue todo un lastre para la directiva entrante, que poco a poco va amortizando el capital. Pagando unas cuotas de 650 euros al mes, no será hasta el año 2035 cuando se pongan al día con el banco. Les quedan 81.000 euros por amortizar.

Pago del IBI

Antonio Rodríguez recuerda que, cuando en 2021 asumió el cargo, la situación económica era tan mala que «esto estaba por cerrar». No había ni un euro para pagar el gasto corriente. Estaba pendiente el pago del IBI, 4.000 euros que tuvieron que satisfacer varios socios de su propio bolsillo y que, algún día, tendrán que recuperar su dinero. No podían dejar de pagar ese impuesto para poder seguir optando a subvenciones. La comunidad de montes de Lavadores también realizó aportaciones. Ante ese panorama, Antonio Rodríguez afirma que su candidatura era «suicida», pero se arriesgaron por el bien de la parroquia. «Desde ese tiempo, hicimos una labor de recuperación, de no generar nuevas deudas y lo conseguimos. Estamos al día con Hacienda, la Seguridad Social y cerramos el año pasado con 430 socios de pago», afirma el presidente de la entidad vecinal. Pero los logros obtenidos todavía no son suficientes y, por ese motivo, han hecho el llamamiento a la ciudadanía. «Esta es una institución con unas posibilidades muy grandes para organizar cursos, talleres, fiestas o eventos. Nuestro objetivo es mantener la asociación para que siga funcionando, que la gente vuelva a hacer uso de la entidad, hay sitio para todos», afirma.

La asociación mueve a cientos de vecinos que utilizan las instalaciones para asistir a actividades lúdicas, deportivas y culturales. Además cuenta con una ludoteca. Pero nada se puede romper porque desequilibraría sus cuentas. «Se isto pecha, acabouse Lavadores», afirma el presidente.