La Xunta abre expediente por un vial en Cabo Estai que acaba en las rocas

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO

XOAN CARLOS GIL

La carretera proyectada para dar servicio a nuevas viviendas de lujo en la costa de Vigo no se ajusta al permiso

04 feb 2023 . Actualizado a las 10:57 h.

Un expediente sancionador pesa sobre un camino abierto en Cabo Estai que es objeto de una fuerte polémica por parte de colectivos vecinales y ecologistas. El vial asfaltado de 125 metros de longitud que discurre de forma perpendicular a la calle Arquitecto Antonio Cominges hasta acabar en unas escaleras de hormigón que dan a las rocas del mar darán servicio a una urbanización de viviendas de lujo que promueve una familia de la zona. Su construcción no se ajusta al proyecto que había sido autorizado y ha conllevado también la realización de movimientos de tierras con rellenos en dos parcelas colindantes.

Decenas de personas se concentraron el año pasado en la zona para protestar por lo que consideraban una «desfeita medioambiental» y reclamaron la paralización del proyecto.

Las obras recibieron una primera denuncia que fue archivada porque contaban con una autorización de la Xunta en la parte afectada por las zonas de servidumbre de protección y tránsito del dominio público marítimo terrestre. No obstante, la asociación de vecinos de San Miguel de Oia presentó un recurso contra dicha resolución, pidiendo la adopción de las medidas precisas de protección de la legalidad urbanística. Esta alegación surtió efecto y motivó que un inspector urbanístico de la Axencia de Protección da Legalidade Urbanística se desplazara hasta el lugar para comprobar si las obras realizadas se correspondían con el proyecto que había sido autorizado. La conclusión a la que llega el funcionario es que no, que los trabajos realizados constituyen una «infracción grave» consistente en la realización de construcciones no autorizadas en una zona de servidumbre de protección.

Por este motivo, el director de la APLU ha resuelto incoar un expediente sancionador y de restitución y reposición de la legalidad urbanística. La investigación se dirige contra siete miembros de una misma familia, un constructor y tres técnicos directores de obras por los trabajos realizados en la zona de servidumbre de tránsito y de protección de dominio público marítimo-terrestre. Se trata de una construcción realizada «sen axustarse á autorización autonómica concedida, consistentes en urbanización e apertura de vial no lugar de Cabo Estai, parroquia de San Miguel de Oia».

La investigación detectó irregularidades en la construcción del vial. Cuando el inspector urbanístico visitó la zona en mayo del año pasado, las obras ya se habían completado en un 97 %.

Irregularidades

El trazado del nuevo viario y de las aceras en la calle Arquitecto Antonio Cominges no coincide con lo recogido en el proyecto. El informe expresa que la superficie adoquinada ejecutada es muy inferior a la proyectada. La calzada estaba previsto que fuera pavimentada en hormigón impreso, pero se encuentra ejecutada en asfalto. En el margen orientado al norte, pegado al muro de piedra que limita las propiedades, se proyectaba una franja de un metro de ancho de hormigón con diferente color y textura que el resto del viario. «Atópase executada en asfalto sen diferenciar do resto da calzada». Además las farolas y la canalización del alumbrado público se proyectaban en la margen sur del viario, pero se hicieron en el extremo norte. Está sin ejecutar un borde de piedra de granito en el margen sur del nuevo viario que se contemplaba en el proyecto. También se compactó el terreno mediante un relleno de diversos materiales, en lugar de utilizar zahorra artificial granítica compactada. Las escaleras del final del vial tampoco se han construido como estaba previsto, ni tampoco el fondo de saco para la maniobra de vehículos, que se ha desplazado unos 5,40 metros. También se derribó parte de un muro y se colocaron tubos metálicos para un cierre.