Tras oír a los jueces, sopesa varias modificaciones sobre el proyecto inicial
24 ene 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La Cidade da Xustiza de Vigo ya ha empezado a rodar. Una de las dos secciones de la Audiencia Provincial en Vigo se muda hoy mismo al nuevo palacio judicial y, además, se estrena la macrosala, la mayor de Galicia, con su primer juicio a cuatro supuestos defraudadores de Hacienda. Pero la Xunta sopesa si poner en marcha varios arreglos que reclaman los magistrados que ya ocupan la torre del antiguo Hospital Xeral.
Aunque la mudanza, que concluirá en abril, sigue a buen ritmo, la Vicepresidencia Segunda de la Xunta ya ha sopesado varias modificaciones en el proyecto inicial. Fuentes oficiales explican que la Administración está «a tomar nota» de las necesidades que han detectado durante el traslado. Según apuntan en la Xunta, la idea es estudiar las posibles mejoras una vez que la mudanza haya finalizado.
La Xunta hizo oídos a las peticiones de los magistrados y ahora está en la fase de recoger las necesidades para, más adelante, ver la viabilidad técnica.
Una de las primeras peticiones ha surgido de la propia Audiencia, al descubrir que su sala asignada es pequeña para el perfil de juicio que deben realizar. Aunque disponen de la posibilidad de usar la macrosala, esta es compartida y tienen que esperar su turno, lo que en el edificio de la calle Lalín no ocurría porque era bastante espaciosa (acogió a 30 acusados de Nigrán por acoso a una vecina y a otros 30 comerciantes de A Pedra). Aunque la Cidade da Xustiza dispone de 39 salas, muchas de ellas son minúsculas y la alternativa que se baraja es tirar tabiques para ampliarlas, lo que facilitará los juicios de lo penal. Hay que tener en cuenta que en las próximas semanas, varios juzgados de lo penal tendrán que celebrar vistas en la macrosala con, al menos, cuatro acusados porque los implicados y sus abogados no caben en las salas minúsculas que tienen asignadas para el día a día.
Otra modificación que han solicitado los jueces es la instalación de estores o parasoles en las ventanas de las oficinas, para no ser cegados por la luz y crear un ambiente fresco.
Por su parte, los funcionarios se quejan de que, en cada planta, la plantilla de dos o tres juzgados deben compartir oficina, separados por un armario de archivos, lo que resta confidencialidad.