La mayoría de las intervenciones canceladas son de traumatología; las bajas reservas afectan a toda Galicia
13 dic 2022 . Actualizado a las 21:58 h.El Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo se ha visto obligado a suspender diez intervenciones quirúrgicas este martes por la mañana por falta de sangre, según confirman fuentes oficiales del Servizo Galego de Saúde. Se trata, en su mayoría, de operaciones de traumatología. El Sergas explica que las intervenciones serán reprogramadas, lo que significa que se volverá a citar a los pacientes tan pronto se pueda.
En algunos casos, los hospitales cambian una operación por otra que no tiene necesidad de bolsas de sangre, por lo que el número final de cirugías que se han realizado no tiene por qué verse alterado. Pero las diez personas que tenían vez para pasar hoy por el quirófano no han podido entrar.
Las reservas de sangre están bajas en toda Galicia. Antes de comenzar la semana del puente de la Constitución, la Axencia de Doazón de Órganos e Sangue (ADOS) hizo un llamamiento a la donación, para tratar de reforzar las reservas. En este momento, hay escasez de los grupos 0 + y A. En Galicia hacen falta cada día medio millar de donaciones de sangre para que el sistema sanitario siga funcionando, ya que se utilizan en todo tipo de terapias. Determinadas operaciones no se pueden realizar sin ellas.
Médicos jubilados
En un acto celebrado este mediodía en el Cunqueiro, el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, pidió al Gobierno central que aclare si la Xunta va a poder mantener en activo a los médicos jubilados con los que se ha reforzado la atención primaria. El año pasado, la Xunta llegó a recontratar a 86 profesionales de los centros de salud que ya se habían jubilado, después de que el Ejecutivo activase esta posibilidad por la sobrecarga del sistema. Les encomendó asistencia telefónica: tramitar bajas, hacer seguimiento de los procesos de infección por el coronavirus y otras cuestiones. Quedan 44 médicos en activo, que pueden compatibilizar el salario con la pensión.
«Temos inquietude polo que vai pasar», dijo Comesaña, que aseguró que habló la semana pasada con el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, y que hoy le envió una carta. Su intención es mantener a todo el personal que quiera «todo o que permita o marco lexislativo».