El bar que parece un barco tiene nuevo capitán

Begoña Rodríguez Sotelino
begoña r. sotelino VIGO / LA VOZ

VIGO

M.MORALEJO

La Goleta, un original pub vigués que es como un navío de madera, se reinventa de la mano de Néstor Torres, apasionado del rugbi que ha respetado la estructura clásica de un local que vuelve a llenarse de vida

10 sep 2022 . Actualizado a las 00:16 h.

Néstor Torres es desde hace tres meses el flamante gestor de La Goleta, un bar vigués que acumula nada menos que 40 años de trayectoria y mil historias ocurridas y contadas entre la barra, los sillones Chester y los taburetes forrados de rojo de un espacio que ya desde el exterior tiene apariencia de embarcación clásica, una joya de la hostelería con aspecto de pub inglés forrado de madera por fuera y por dentro, desde el suelo al techo.

Torres es un hostelero curtido en el gremio desde que llegó a Vigo en el 2007 procedente de su Argentina natal. Y es también un apasionado seguidor del rugbi, que sigue practicando. Es uno de los socios fundadores del Melgachos, club de veteranos que puso en marcha con Pablo Osorio, Juan Luis Freire, Paco Ruedas y Eisuke Yoshi. Esa faceta suya la ha incorporado al nuevo proyecto en el que se ha embarcado, ya que La Goleta se ha convertido en un punto de referencia para los amantes de este deporte.

«Las vueltas que da la vida», reflexiona al recordar que en La Goleta tuvo su primer empleo en Vigo. «Trabajé tres meses como camarero», apunta. Néstor se quedó en la ciudad sin habérselo planteado antes. El rugbi, de nuevo, tuvo algo que ver en el proceso. El mundial de Francia de la pelota oval fue lo que trajo a Europa. Aprovechó para hacer turismo también por España. Vigo se apareció en su camino e inició una nueva etapa en la que cambió hasta de sector. «Estoy en hostelería desde que me vine aquí. Yo antes trabajaba en comercialización de pescado en el puerto de Mar del Plata». Su idea no era quedarse en Vigo, pero fueron surgiendo oportunidades y además apareció alguien en su vida. «Tuve la suerte de conocer a Vero, mi pareja hace 12 años, que fue una de las razones que reforzó la idea de quedarme», reconoce.

Junto a la viguesa Verónica Peleteiro lleva actualmente tres negocios, «y todos tienen historia», remarca señalando dos de los viejos conocidos del Casco Vello, el Fai Bistés, que cogieron en el 2018, y La Colegiala, del que se hicieron cargo tras la pandemia, en el 2021, «respetando también sus nombres y su esencia, excepto algunos toques como el argentino en las carnes del primero, aunque el parrillero es uruguayo», destaca el profesional que, como antecedente en la zona añade a su currículo la gerencia del Hotel Princesa. «Allí, en el bar del establecimiento, habíamos empezado a forjar ese espacio de ocio para aficionados al rugbi. Fue donde fundamos Melgachos». Tras dejar el hotel, a Torres no dejaban de preguntarle cuándo volverían a juntarse así. Pero ni el Fai Bistes ni La Colegiala le parecían lugares adecuados, hasta que apareció la oportunidad de capitanear La Goleta, que llevaba tres años cerrado.

El local está abierto a todo tipo de clientela, desde trabajadores del entorno de Montero Ríos que acuden a desayunar o a tomar el café de media mañana, a ciudadanos que tienen como referencia esa zona de ocio para el vermú o para las copas nocturnas. Si además les gusta el rugbi, lo disfrutarán con más deleite en la decoración (camisetas que se añaden a famosas fotos de The Beatles y los Stones), las charlas y la pantalla de tele donde se pueden ver partidos. «Mi intención es crear ambiente de rugbi con amigos. Yo trato de devolverle al deporte lo que me dio a mi: amistad, comprensión y paciencia. Hay que tener calma para avanzar y el rugbi es avanzar siempre», explica. Con el tiempo, espera que La Goleta se convierta en una especie de embajada que acoja todas las banderas y colores de equipos, «es un espacio para todo el mundo», incluso para los que no tienen ni idea de este deporte que inspira fraternidad. En su caso, tiene ya cantera en la familia, ya que su nieta juega en el Vigo Rugby, cuenta con orgullo el argentino que jugó en el Comercial de su ciudad, Mar del Plata. La frase de una canción de los Stones: «It’s only rock and roll but I like it» era el lema que el bar tenía antes en su fachada. Ahora es «Drinks & rugby» pero sin dejar atrás la música, sobre todo jazz, pero además, sesiones en directo, ya que van a empezar a ofrecer conciertos de diferentes bandas los jueves y viernes. Con la llegada de septiembre, retorna también para los veteranos Melgachos la temporada de entrenamientos, que llevan a cabo en el Colegio Montecastelo los miércoles. También vuelven los torneos y empiezan yendo a jugar a Mondragón. En Vigo organizan cuatro citas clásicas, el Movember solidario contra el cáncer, el Negro Mostaza en enero; el de la Reconquista en marzo, contra franceses siempre que es posible; y el de playas en julio», repasa desde un bar hecho con cariño desde los cimientos del edificio que lo alberga.

Desde 1982

 Dónde está

Calle Luis Taboada, 29. Vigo