Nico, a punto de iniciar su crono

X. R. C. VIGO / LA VOZ

VIGO

Luis Fernández

El regatista vigués y su compañera Silvia Mas, que ayer recibió el alta, comenzarán de inmediato a entrenar en el 470 mixto, que tendrá base en Vilagarcía

12 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Nico Rodríguez se dispone ya a comenzar su contrarreloj para los Juegos Olímpicos de París. Silvia Mas, su compañera del 470 mixto, recibió ayer el alta después de seis meses parada por una lesión de rodilla. «O mércores (por mañana) chega e intentaremos saír a auga como toma de contacto para adestrar oficialmente o xoves», comenta el bronce olímpico. La idea es fijar Vilagarcía como la primera sede para un período iniciático en donde el nuevo tándem se tiene que conocer. «Temos que estar xuntos, ver como queremos facer as cousas, as manobras e coordinarnos. Temos que medrar moito como equipo», apunta el vigués.

Para los dos será una carrera contra el tiempo, pero asumiendo que lo que resta de este año será una especie de puesta a punto para el 2023, cuando tendrá que afrontar la clasificación del barco, en el Mundial de La Haya, en primer lugar. Eso no quiere decir que vayan a renunciar a nada dado el espíritu competitivo de ambos, por eso Nico piensa en presentar batalla tanto en el Europeo que se celebrará en el mes de septiembre en Turquía como en el Mundial de la última semana de octubre en Israel.

«Este ano, o obxectivo é buscar a nosa mellor versión para o ano que vén abordar o primeiro reto real: clasificar a España para os Xogos nesta clase», sostiene. Una tarea en la que también anda enfrascado Jordi Xammar, su antiguo compañero, con Nora Brugman como acompañante, lo que anuncia después una competencia feroz por la única plaza en juego del 470 mixto.

Nico, medallista de bronce, y Silvia Mas, campeona del mundo, tienen mucho que decir en esta carrera y a pesar de la desventaja con la que parten. «Somos dúas persoas moi competitivas e sen a presión dun resultado, a cousa pode saír ben. Hai que ir coa cabeza liberada, con ganas de traballar, sabendo as armas que tes e xa se verá», razona.

Porque un año después de bañarse en el bronce olímpico, Nico quiere luchar por volver a revivir el sueño. «Foi un exitazo volver de Toquio nunha medalla pero agora comezamos de cero. Creo que temos un equipo fantástico, que somos un tándem con moito potencial e agora temos que traballara para dar o mellor de nós», analiza Rodríguez.

«Estiven navegando en todo o que puiden», dice de su actividad

Durante estos seis meses de espera, Nico Rodríguez no ha perdido el tiempo. «Estiven navegando en todo o que puiden», comenta el regatista vigués, que se embarcó en un J70, estuvo en el Mundial de 6 metros de Sanxenxo, también en algún crucero y hasta en un barco volador. «Subinme en todo o que me deixaron», dice de un modo jocoso, mientras explica los motivos de semejante frenesí. «O bo que ten o noso deporte é que ao final no só é unha técnica dun barco, senón tamén a parte táctica, estratéxica, entender como se move o vento, a auga e todos os factores que rodean ao barco á hora de navegar. Así podes practicar a vela na parte máis mental».

Entre las citas, a Nico le tocó vivir en primera persona todo el revuelo que montó la visita del Rey Emérito a Sanxenxo en el trofeo previo al Mundial, una visita que el vigués encuadra en la visibilidad que dio a su deporte: «Foi moito lío, pero creo que dentro do que cabe iso dálle un pouco máis de notoriedade á vela, algo que ao final ven ben a todo o mundo. Que a xente vexa que hai competicións moi chulas», más allá de las tradicionales citas olímpicas.