El Puerto de Vigo planta cara a Leixões con bonificaciones para captar tráficos

Alejandra Pascual Santiago
alejandra pascual VIGO / LA VOZ

VIGO

M.MORALEJO

Prevé subidas del 16 % en contenedores y recuperar el pulso de la automoción

01 jul 2022 . Actualizado a las 20:35 h.

Para Vigo, su puerto es estratégico. La economía de la ciudad depende de los tráficos marítimos y de la capacidad de la Autoridad Portuaria para dar respuesta a los operadores y distinguirse de la competencia. El plan de empresa del organismo que preside Jesús Vázquez Almuiña augura una evolución positiva en los próximos cuatro años para todas las mercancías que mueven los muelles de la ciudad. Una de las claves será la política de bonificaciones para atar clientes.

Para los contenedores está previsto un crecimiento entre el 2023 y el 2027 del 16,18 %. La previsión para el 2026 es mover 269.768 teus (recipientes de veinte pies de altura). Es el tráfico que está teniendo un mejor comportamiento en los últimos años y el acumulado del 2022 hasta mayo ha pulverizado todos los registros. De ahí que la apuesta sea decidida. El plan de empresa reconoce la «fuerte» competencia de Vigo «sobre todo con la terminal portuguesa de Leixões» que en los últimos años se ha consolidado como la principal terminal del noroeste peninsular.

El Puerto trata de fortalecer la captación de contenedores a base de bonificaciones. Por ejemplo, favorecen el tráfico transoceánico de la naviera Macs desde Sudáfrica que se intenta adjudicar la Administración de los Puertos de Douro, Leixões y Viana do Castelo (APDL). Se ha potenciado igualmente una conexión entre Vigo y Montreal (Canadá) de la naviera Hapag Lloyd y desde el 2021 disponen de un servicio con la gigante CMA-CGM que utiliza los muelles olívicos como solución alternativa a la congestión en los puertos de Algeciras y, de nuevo, Leixões. La previsión hasta el cierre del 2022 es de unas cuarenta escalas.

Otra política de bonificaciones que se ha aprobado tiene que ver con los buques con escala de avituallamiento, aprovisionamiento o reparación. Se refiere al tráfico que, a lo largo de su navegación, tienen la necesidad de resguardarse en aguas tranquilas, como ocurrió le ocurrió al Seven Borealis, un buque especializado en gasoductos y oleoductos, el pasado mes de abril, y que fondeó en medio de la ría.

El Puerto de Vigo interpreta que los fondeos en segunda zona, como es el caso de las islas Cíes, «están muy limitados» y aspira a que empleen las zonas de atraque y, a su vez, servicios adicionales como aprovisionamiento y pequeñas reparaciones. Proponen bonificaciones del 40 % en la tasa del barco, unos 9.000 euros.

Para los productos laminados y barras de hierro o acero en convencional, que «son el principal generador de empleo del área de influencia portuaria», también se han diseñado planes de ayudas. Están incluidos en el catálogo de las mercancías generales, para la que hay prevista un crecimiento del 15,6 % hasta el 2027. 

Stellantis

Los tráficos de la automoción, que atraviesa tiempos convulsos en toda Europa, son los que presentan la evolución más acentuada. Sin embargo, estas cifras reflejan la confianza en que el sector recuperará su pulso y las unidades de producción y exportación que manejaban antes de la crisis del covid y de los microchips. En el caso del tráfico ro-ro, su incremento entre el 2023 y el 2026 es del 28,4 %, mientras la previsión para los automóviles es del 38,2 %.

Un ejemplo significativo es la diferencia entre la previsión que se estimó hace un año para el tráfico rodado y su posterior actualización conforme avanza el 2022 y Stellantis Vigo continúa registrando continuos parones de actividad. El tráfico rodado aprobado en el 2021 eran 1.133.000 toneladas. El plan de empresa de la Autoridad Portuaria de Vigo para el 2023 rebaja esta cifra hasta las 857.000 toneladas. En el caso de los movimientos de automóviles —la gran mayoría se corresponden con exportaciones—, la reducción es de 139.000 unidades. Es la diferencia entre la previsión elaborada hace un año, 526.000 vehículos, y su actualización, 387.000.

90 escalas y 185.000 cruceristas el próximo año

Tras dos ejercicios interrumpidos por las restricciones derivadas de la emergencia sanitaria del coronavirus, el tráfico de cruceros en Vigo aspira a recuperarse paulatinamente. Según el plan de empresa más inmediato, aunque la actividad ha comenzado a recuperarse, «no es hasta 2023 cuando prevemos una normalización del tráfico». Para el próximo año, está previsto que los muelles reciban noventa escalas que brindarán a la ciudad la visita de 185.000 cruceristas. La cifra de amarres que se maneja es similar a la de este año. El mercado potencial, como viene siendo habitual, son cruceros con travesías con destino el Mediterráneo, las islas Canarias o Marruecos, «así como buques que cambian sus rutas estacionales del Caribe a Europa».