Los encargados de perseguir a los autores de los fuegos alertan de su elevada actividad
22 jun 2022 . Actualizado a las 01:00 h.Los últimos incendios forestales surgidos en Navarra, Cataluña o Zamora, que dejó fuero de uso el AVE a Galicia, recuerdan que la actividad incendiaria, con la llegada del verano que comienza hoy oficialmente, es un problema que está a la vuelta de la esquina. Galicia, debido al mal tiempo de los últimos días, supone un excepción en el conjunto de España; por eso, los encargados de colaborar en la lucha contra el fuego y de perseguir a quienes provocan los fuegos en los montes alertan de lo que está por venir. Para empezar, sitúan once zonas de alto riesgo en el sur de la provincia: las parroquias de Mondariz, Foxaco, Gargamala, Sabaxáns, Riofrío y Vilar (en el ayuntamiento de Mondariz), Guillade, Nogueira y Padrón (Ponteareas), Santa Marta de Ribarteme (As Neves).
A mayores, San Xurxo (Salceda de Caselas), la única parroquia considerada de alta actividad incendiaria (Paai) en el Plan de prevención y defensa contra los incendios forestales de Galicia (Pladiga) del 2022, ya publicado en la web de la Consellería de Medio Rural. Pero La experiencia de los efectivos de la Policía Autonómica y del Seprona de la Guardia Civil consultados, junto a las estadísticas de años anteriores, expone que hay otras zonas igual de calientes. Los funcionarios consultados elaboran un listado que incluye las otras parroquias citadas, y que, en su día a día, requieren la misma atención que la parroquia de San Xurxo. A mayores, exponen que en el sur de la provincia, actualmente, se tiene perfectamente ubicados a dos incendiarios que, aunque llevan semanas sin actuar, son un riesgo potencial para la seguridad de los montes y, en consecuencia, de sus habitantes y propietarios de terrenos o inmuebles.
Cámaras fijas
Aunque el Pladiga solo considera parroquia especialmente sensible a San Xurxo, sí considera todo el sur de la provincia de riesgo especial. A mayores, expone un plano con la ubicación de las cámaras fijas de videovigilancia repartidas esta parte de la provincia. Covelo, Crecente, As Neves, Arbo, A Guarda, Baiona, Tomiño, y Tui cuentan con este método de vigilancia, ya sea para captar información antes de los incendios, como para ubicar los focos que van surgiendo. La investigación de incendios, en el 2022, cuenta con una unidad nueva de investigación formada por agentes forestales que aún está por ver qué papel tienen ante los juzgados, en comparación con los agentes del Seprona o de la Policía Autonómica. Se trata de la Unidad de Investigación de Incendios Forestales (UIFO), que también realizan esperas o colocan cámaras temporales en zonas de riesgo.